El fiscal Vicente Garrido ha iniciado este viernes el trámite de informes finales en el juicio contra Salvador Alba con un duro alegato contra el magistrado, a quien ha acusado de utilizar el poder que le confería la toga para sacrificar el interés general en la búsqueda de “un interés propio y personal”: perjudicar y desprestigiar a la jueza Victoria Rosell durante los siete meses en los que ocupó en su sustitución el Juzgado de Instrucción 8 de Las Palmas de Gran Canaria.