Vieron a la alcaldesa de Mogán contando y metiendo billetes de 50 euros en sobres para comprar votos en las elecciones municipales de 2015. Así lo ha contado en sede judicial uno de sus concejales de aquella época, Domingo Rodríguez González, quien fuera responsable del área de Recursos Humanos del ayuntamiento sureño desde junio de 2015 a febrero de 2016, fecha en la que Onalia Bueno (Ciuca) lo destituyó del cargo alegando “pérdida de confianza”.
Rodríguez es uno de los testigos que ha comparecido este lunes ante el magistrado que instruye la causa, Francisco Javier Ramírez de Verger Vargas, titular del Juzgado de Instrucción 3 de San Bartolomé de Tirajana. La investigación sobre la presunta compra de votos en las elecciones de 2015 y 2019 en Mogán se ha reanudado con testimonios contradictorios, incluso de quienes cuestionaban la veracidad de la denuncia.
Domingo Rodríguez, que concurrió en 2019 a las elecciones en las listas de Nueva Canarias (partido denunciante) tras abandonar Ciuca (formación denunciada), relató que tras los comicios de 2015 Onalia Bueno pidió a cada uno de sus concejales una aportación de 2.000 euros para sufragar gastos de la campaña. El testigo afirmó que efectuó cuatro pagos en concepto de donación que ingresó en la cuenta del Banco Santander que le había indicado la ya entonces alcaldesa. Esas donaciones, agregó Rodríguez, fueron incluidas en su declaración de la renta de 2016.
Según contó el exconcejal de Personal de Mogán. cuando Bueno asumió el bastón de mando municipal se ofrecieron “muchos puestos de trabajo” no solo a votantes y colaboradores de Ciuca, sino también a miembros de su lista electoral. Nombró a dos de ellos, Ahedey Ramírez (miembro de la candidatura de Ciuca en 2015) y al popularmente conocido en el municipio como Antonio ‘Agüita’ (Antonio Domingo Hernández), pero afirmó que había “muchos más”.
También declaró este lunes José Luis Curros, uno de los primeros denunciantes de la compra de votos a través de la asociación Regeneración Democrática. Es otro de los testigos que ha cambiado su versión de los hechos. Ahora mantiene que hubo un complot auspiciado por los partidos en la oposición (Partido Popular y Nueva Canarias) para hacer públicas las denuncias sobre el presunto fraude electoral. Sin embargo, cuestionado por la abogada de la acción popular, ejercida por NC, negó que la denuncia presentada a través de Regeneración Democrática fuera falsa e incluso llegó a afirmar que a él mismo intentaron comprarle el voto.
Curros es uno de los participantes en una conversación grabada por el exalcalde Francisco González (PP) y aportada como prueba del pucherazo. En ese audio, tanto Curros como otra de las testigos que se ha desdicho en su declaración ante el juez, Beatriz Pérez, explican el proceder de Onalia Bueno y otros miembros de Ciuca en campaña y cómo prometía trabajos y ofrecía hasta 150 euros por el voto.
En esa grabación también queda patente que Curros había acompañado a los juzgados a denunciar tanto a Beatriz Pérez como a Cristo Jonatan Rodríguez, otro de los testigos que comparecieron este lunes para reconocer que le compraron el voto, que le ofrecieron un puesto de trabajo y que lo dejaron “tirado”.
Por su parte, Orlando Quintana admitió haber grabado a José Monzón, conocido en el municipio como Pepe el Japonés, contando la trama al exalcalde González, pero dijo no recordar su contenido.
El quinto testigo en declarar este lunes fue José Alfredo Almeida, que grabó a la actual alcaldesa en la campaña electoral de 2019 explicándole cómo debía votar por correo. En su comparecencia ante el juez, sostuvo que en esa conversación no hablaba de controlar a un nutrido grupo de votantes para Bueno y que solo se refería a su voto.