Ya te hablamos más de una vez de la fantástica red de transporte público de la ciudad de Tokio. Hoy vamos a aprovechar el trazado de la Línea de tren de Yamanote (Verde oscuro) que hace un recorrido circular que conecta una buena parte de los puntos más interesantes de la ciudad. Esta es una de las tres líneas de cercanías urbanas que son de gran utilidad para los viajeros y viajeras que visitan la capital japonesa. El trazado circular de la Línea Yamanote es atravesado en dirección Este-Oeste por las líneas Sobu (color naranja) y la línea rápida Chuo (color rojo). Todas coinciden en la Estación de Tokio y Yamanote tiene correspondencia con Sobu en la estación de Yoyogui (Parque Yoyogui y Santuario Meiji) y con Chuo en Shinjiku. Como te decíamos en el post anterior (Ruta 1 de Tres días en Tokio), el utilísimo japan Rail Pass sirve para moverse de manera libre por estas tres importantes líneas de comunicación interna.
Hoy vamos a centrar la ruta usando, principalmente, el trazado de la Línea Yamanote que hace todo el recorrido circular en menos de una hora (es brutal la velocidad y la eficiencia de los trenes internos de la ciudad) lo que nos va a dar la posibilidad de hacer saltos con una rapidez increíble. En el día anterior habíamos visitado los Jardines Hamarikyu, en el barrio de Shiodome. Hoy iniciamos la visita muy cerca de aquí: en el famoso Mercado de Pescado de Tsukiji. Aunque las instalaciones del mercado interior (donde se recibe y se despieza el pescado fresco) se han mudado a Toyosu -en la otra orilla de la bahía tokiota-, aún puede visitarse el mercado exterior dónde puedes ver las tiendas y el ajetreo de los puesteros y los que transportan el pescado fresco. Un consejito: ni tacones, ni sandalias abiertas (si no quieres estar con los pies apestando a pescado todo el día).
Desde aquí tienes dos opciones. Dos combinaciones de metro desde la Estación Tsukiji o un paseo de poco más de 20 minutos hasta la Estación de Shimbashi y ahí tomar el Yamonate hasta la Estación Ueno. El Parque Ueno es uno de los más importantes referentes culturales e históricos de la ciudad. Este enorme parque público ocupa el lugar del antiguo gran templo de Kan'ei-ji, un enorme complejo de santuarios y pagodas que resultó dañado en 1868 tras una cruenta batalla entre samuráis y partidarios de la modernización del país. En el parque aún persisten elementos de los antiguos templos (algunos del siglo XVII) como pagodas, pabellones y jardines (los más imponentes son el Santuario Ueno Toshogu , la Pagoda de cinco pisos, el templo Benten-do y la cara del gran buda de Ueno) . Toda la zona se convirtió en un enorme parque público en el que también hay grandes centros culturales como el Museo de Arte Contemporáneo de Tokio Museo de Arte Contemporáneo de Tokio (8-36 UenokÅen 8-36 – Taito-; Tel: (+81) 3 3823 6921) o el Museo Nacional de Tokio (UenokÅen, 13-9 –Taito-; Tel: (+81) 3 3822 1111), con impresionantes colecciones históricas. Con tres días en la ciudad, ir a un museo te quita mucho tiempo: peri si te gusta la historia, este centro es uno de los imprescindibles de la ciudad. Si tienes la suerte de coincidir con la época de floración de los cerezos –abril, mayo-, este es uno de los lugares preferidos por los tokiotas para disfrutar de ese espectáculo natural único en el mundo.
Si no estás cansado de ver templos te recomendamos hacer el esfuerzo de salirte del área de influencia de la Línea Yamanote para visitar el Templo de Senso Ji (2-chÅme-3-1 Asakusa –Taito-; Tel: (+81) 3 3842 0181), un imponente espacio sagrado dedicado a la diosa de la Misericordia y que es el edificio más antiguo de todo Tokio. Aunque el templo ha sido reconstruido muchas veces a lo largo de los siglos, sus orígenes se remontan al siglo VII. Vuelve a la Estación Ueno y toma el metro (Línea G-17 –naranja-) hasta la Estación Asakusa (la otra opción es caminar 1,8 kilómetros por la avenida Asakusa Dori). Desde ahí dirígete a la Puerta de Kaminarimon – trueno-, una de las grandes portadas históricas que conducen al templo y que está adornada con un enorme farol de bambú y papel de más de 400 kilos de peso –es una de las fotos paradigmáticas de cualquier visita a la ciudad-. Antes de llegar al complejo sagrado tendrás que caminar unos minutos por la calle Nakamise, una de las arterias comerciales tradicionales más antiguas de la ciudad (aunque hoy dominan las tiendas de recuerdos aún hay pequeños puestos de kimonos tradicionales y cerámica) estrechamente vinculada al propio templo. El Templo Senso Ji es una de las grandes joyas históricas de la ciudad. La mayoría de sus edificios son de la época Edo y aún es uno de los centros de peregrinación más importantes del país.
UNA TARDE EN YANAKA.- De vuelta al trazado de la Línea Yamanote, te mostramos uno de los secretos mejor guardados de la ciudad. Al norte de Ueno se extiende el distrito de Yanesen, una de las zonas residenciales más antiguas de la ciudad. Vuelve a la estación de Ueno para volver a tomar el tren aunque sea para hacer sólo dos estaciones hasta Nippori (para no perder mucho tiempo caminando). Yanaka es uno de los pocos barrios de Tokio que no ha sufrido grandes transformaciones en los últimos 150 años y aún pueden verse algunos rincones que guardan la esencia de la vieja Edo. Yanaka es uno de nuestros rincones preferidos de Tokio. Es un lugar auténtico lleno de viejos templos, calles comerciales muy antiguas (como Yanaka Ginza) y viejos cementerios cuajados de cerezos. Aquí se encuentra, por ejemplo, el Templo de Kaneiji (Uenosakuragi 1-14-11; Tel: (+81) 3 3821 4440), un edificio del siglo XVII que sirve de lugar de descanso a seis de los trece shogunes de la Era Edo y justo al lado el Templo de Jomyoin (Uenosakuragi, 2 Chome−6; Tel: (+81) 3 3828 2791) con más 54.000 estatuas de jizô, esos pequeños nenes gorditos que guardan el alma de los niños no nacidos y protegen a los que sí nacieron. Este barrio, que un día fue famoso en toda la ciudad por sus templos y prostíbulos es un lugar que casi no aparece en las guías y que merece la pena; es como ir a cualquier ciudad europea y dejar pasar la oportunidad de ver el barrio histórico (VER NUESTRA GUÍA DE YANAKA).
UN PLAN NOCTURNO EN AKIHABARA.- Para terminar el día te proponemos desandar lo andado para visitar el barrio de Akihabara, una de las excentricidades más curiosas de la capital. Lo mejor es volver a la Línea Yamanote y bajar en la Estación Akihabara y empezar a callejear por las calles que se encuentran al oeste de la línea del tren. Lo ideal es llegar poco después del atardecer para ver las luces de neón y el bullicio de la gente que sale de trabajar y gasta aquí sus horas de ocio y buena parte de sus yenes. El lugar es famoso por las tiendas de las últimas novedades electrónicas e informáticas, los ruidosos salones de videojuegos y las tiendas de anime y manga. Esta es una de las zonas donde se concentra la cultura otaku y cosplay –abundan los disfraces, muchos de ellos bastante subidos de tono-. Aquí puedes comprar casi de todo (muchas tiendas son libre de impuestos). En la zona también abundan los Maid Cafés, locales atendidos por chicas vestidas de sirvientas, los sexshops y los karaoes. Es un lugar de extremos donde no es extraño ver gente borracha tirada por las calles. El contrapunto tradicional a este verdadero barrio dedicado al exceso es el Yushima Seido (1-chÅme-1-4-25 Yushima,), un viejo templo confucianista del siglo XVII.
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