El río Chao Phraya y sus bocas subsidiarias buscan el mar entre curvas sinuosas y mil y un canales que se convierten en una red intrincada de complicado diseño a medida que el cauce de aguas de color café con leche se aproxima a la ciudad de Bangkok. Tailandia entera es un regalo del Chao. El río baja desde las montañas del norte en forma de miles de arroyos, riachuelos y afluentes de entidad que se unen a poco más de 300 kilómetros de la desembocadura formando la autopista más transitada del país. Red de agua que forma uno de los valles más fértiles del mundo; alma del país. Agua… Caminos de agua que van en todas las direcciones creando un espectacular delta que, casi, ocupa una cuarta parte del país y que es escenario de gran parte del día a día de los habitantes de estas tierras bajas próximas a la capital.
Y a hacer las compras del día también se va a golpe de remo o acompañado por el rítmico y cansino chof chof de los pequeños motores que impulsan las canoas. Una de las estampas más auténticas de los alrededores de Bangkok son los mercados flotantes. Hay muchísimos. La mayoría son pequeñas agrupaciones de vendedores en torno a algún embarcadero, pero hay algunos que son como pequeñas ciudades flotantes en las que se puede comprar cualquier cosa. Viajar Ahora te invita a pasear por tres de estos mercados. Desde el impresionante y, cada vez más, turístico de Damnoen Saduak al pequeño y encantador Taling Chan. El que quiera perderse entre la multitud y fundirse con viajeros y viajeras de todo el mundo optará por el primero o el vecino de Amphawa; el que quiera sentirse, de verdad, un extranjero en un mundo único elegirá el pequeño Taling Chan. O visitará los tres, si tiene tiempo para ello. Aquí te mostramos dónde están, cómo puedes llegar y lo que puedes hacer.
DAMNOEN SADUAK es el más grande de los mercados flotantes del delta del Chao Phraya y uno de los grandes mitos viajeros del Sudeste asiático. A su favor, al contrario que otros mercados más pequeños, tiene que abre todos los días (entre las siete de la mañana y las cinco de la tarde) y que, aunque se encuentra a más de 100 kilómetros del centro de Bangkok, está muy bien comunicado con el centro de la capital tailandesa. En su contra, su fama de carácter mundial, lo que lo ha convertido en una atracción turística de primer orden que recibe miles de visitantes al día. Por eso conviene iniciar la visita a primeras horas de la mañana, antes de que empiecen a llegar los buses cargados de turistas. Como los otros mercados flotantes del país, el origen de Damnoen Saduak fue modesto. Al principio fue un sencillo ‘supermercado’ de alimentos sobre el agua que, poco a poco, fue convirtiéndose en una atracción de fama mundial donde, además de comprar frutas, verduras o pescados, entre otras viandas, también hay tiendas de recuerdos, restaurantes y todo lo que se te pueda ocurrir. Los canales cubren una superficie de varias hectáreas y conviene pasear en alguna canoa sin motor (son más caras pero disfrutarás más del paseo).
CÓMO LLEGAR: Los buses en dirección BangPe y Damnoen Saduak salen desde la Terminal Sur de Bangkok (Sai Tai Mai Southern Bus; Borommaratchachonnani Road) entre las 6.00 y las 22.00 con frecuencias próximas a los 40 minutos. El trayecto ronda las dos horas y el precio es de unos dos euros. Otra alternativa es tomar las Combis que salen desde Victory Monument (unos cuatro euros). Esta opción cuenta con el problema de que la hora de regreso máxima ronda las 15.00 horas.
AMPHAWA SAMUT SONGKHRAM es el otro gran mercado flotante que se instala en las inmediaciones de la capital (a 90 kilómetros de la capital) aunque sólo los viernes, sábados y los domingos (entre las 12.00 y las 21.00) lo que lo convierte en una de las grandes distracciones de fin de semana de los habitantes de Bangkok y las inmediaciones. Por lo tanto, estamos ante un mercado relativamente poco frecuentado por los turistas. Al igual que sucede en Damnoen, se vuelven a repetir las imágenes de canales, plataformas flotantes repletas de tiendas, puestos, pequeños tenderetes de comida tradicional y barcas cargadas de las más variadas mercaderías. Pero uno de los puntos fuertes de este lugar es que tiene una de las mejores ofertas gastronómicas de los alrededores de Bangkok. Otro de los espectáculos de este viejo mercado (está instalado en el lugar desde finales del siglo XVIII) es esperar a que caiga la noche para ver el espectáculo que miles de luciérnagas protagonizan al volar sobre las aguas del río Naam Tha Chin y el canal que ocupa esta particular instalación comercial. Es un buen momento para cenar algo junto a cientos de visitantes locales. A pocos kilómetros en dirección hacia la costa se encuentra el Mae Khlong (a escasos seis kilómetros) conocido como el ‘Mercado del Tren’, famoso en todo el mundo al estar atravesado por una línea férrea que divide en dos la modesta despensa. Los puestos de verduras están tan cerca de las vías que, literalmente, los trenes circulan justo por encima de las cajas repletas de vegetales.
CÓMO LLEGAR: Desde Victory Monument salen las Combis que viajan hasta Amphawa. El servicio empieza a las 6.30 horas y cesa a las 20.00 (dos euros). La última combi desde Amphawa sale a las 20.00 horas por lo que si quieres cenar en este lugar y ver las luciérnagas (merece la pena) te puedes alojar en alguna de las casas de huéspedes del lugar (los precios rondan los 30 euros por noche). Las combis paran en Mae Khlong. Para seguir hasta Amphawa puedes tomar un taxi que no te saldrá más de 3 euros o un songthaew (furgoneta colectiva) por unos cuarenta céntimos de euro.
TALING CHAN está a apenas quince kilómetros de Bangkok y, paradójicamente, es el menos conocido de los mercados flotantes del conurbano de la capital tailandesa y, por lo tanto, el más auténtico. A las típicas plataformas flotantes, barcazas y canales hay que añadir preciosos palafitos, puentes sobre los canales y algunos templos. Este mercado encantador se encuentra en pleno río Chao Phraya (en el canal de Khlong Chak Phra) y sólo abre los sábados y los domingos (entre las 8.00 y las 17.00). A diferencia de los mercados ‘turísticos’, en Taling Chan vive gente; es habitual ver a los niños bañándose en los canales y a las mujeres atender sus casas. Es, por lo tanto, la mejor manera de disfrutar de un auténtico mercado local sin impostas ni añadidos de cara a la galería. La mejor hora para visitarlo es entre su apertura y las primeras horas de la tarde, cuando llegan cientos de habitantes de la cercana Bangkok para aprovechar la impresionante oferta de puestos donde ofrecen la impresionante cocina tradicional tailandesa. A la entrada hay un pequeño mercado de recuerdos, pero la inmensa mayoría de los puestos ofrecen productos locales y comida. Comer aquí es muy barato (entre los 70 céntimos y el euro y medio por plato).
CÓMO LLEGAR: La proximidad con la capital hace que sea muy fácil llegar hasta el distrito de Taling Chan a través de la línea 79 del servicio de buses (ver recorrido). Hay que bajar en la última parada y tomar un taxi hasta el mercado (2,5 euros aprox). La otra opción es alquilar una barca de cola larga en el embarcadero de Tha Chang (unos 30 euros) y hacer un bonito paseo fluvial hasta el mercado.
Otros mercados flotantes de Bangkok son Bang Khu Wiang que abre todos los días de 16.00 a 19.00 y el curioso Tha Kha –muy cerca del mercado de Amphawa- que tiene la particularidad de abrir sólo seis días al mes en función del calendario lunar (6.00 – 12.00).