El cielo es una muy buena excusa para viajar y cada vez son más lo que programan sus vacaciones o alguna de sus salidas anuales en función de los grandes eventos astronómicos que pueden divisarse desde los diferentes lugares del mundo. El año se estrenó con las Cuadrántidas, una lluvia de estrellas visible en el Hemisferio Norte (el punto de referencia es la Osa Mayor, en la constelación del Boyero) que puede verse durante la primera semana del año y que tuvo su pico máximo en la madrugada del 3 al 4 de enero. No fue más que el comienzo de un calendario de eventos que casi sin pausa nos llevará al eclipse penumbral de luna del próximo día 10. Como sucedió el año pasado (2019) Argentina y Chile se llevarán el premio gordo con un eclipse total de sol que será visible en la Patagonia más austral el próximo 14 de diciembre. Aún queda muchísimo tiempo para que llegue ese momento y, entre medias, podremos disfrutar de otros eventos astronómicos en diversas partes del mundo.
10 – 11 de enero; Eclipse de luna penumbral . Será el primero de los cuatro eclipses lunares del año (todos ellos de las mismas características). En este tipo de eclipses, la luna sólo pasa por la zona periférica de la sombra que proyecta La Tierra, por lo que el satélite sólo se oscurece de manera parcial. El fenómeno dará comienzo a las 18.07 horas del horario central europeo (17.07 en Canarias) y durará cuatro horas y cinco minutos. Se podrá ver en Asia, Oceanía, Europa, África, parte de América del Norte y del este de América del Sur (en estos dos últimos casos por razones horarias).
9 de febrero; superluna . Será, también, la primera de las cuatro superlunas del año. La proximidad del satélite a nuestro planeta hace que el disco lunar se vea más grande de lo habitual.
10 de febrero; máxima elongación de Mercurio . Una de las pocas ocasiones para ver al planeta Mercurio a simple vista. Justo después de ponerse el sol podrá verse como un pequeño punto amarillento muy cercano a la línea del horizonte. Por elongación se entiende al ángulo que forma cualquier objeto celeste con la posición del sol desde el punto de vista terrestre. Esta posición extrema hace que el planeta esté lo suficientemente lejos del sol (según nuestro punto de vista) para poder verse a simple vista. Es una oportunidad única.
Marzo, un mes de conjunciones planetarias . La primera tendrá lugar el 9 de marzo cuando Venus y Urano compartirán ascensión recta. Venus se situará a apenas 2°24' al norte de Urano y el fenómeno podrá observarse poco después del atardecer (19:32 Hora Central Europea). El 20 de marzo serán Júpiter y Marte los que se podrán ver casi juntos antes del amanecer (3 horas, 3 minutos antes de la salida del sol desde España). El gigante gaseoso pasará a 00°42'al norte de nuestro vecino rojo. El 23 de marzo le toca el turno a Marte y Plutón. El planeta rojo pasará a tan sólo 00°01 'al sur del `planetoide’ a sólo 19° sobre la línea del horizonte. (2 horas y 59 minutos antes del Sol). Los últimos planetas en ‘bailar juntos’ serán dos de los más ‘grandes’ desde nuestro punto de vista, por lo que el fenómeno podrá a verse a simple vista. Marte y Saturno se ‘acercaran’ el 31 de marzo poco antes del amanecer (3 horas y 2 minutos antes de la salida del sol) a 21° de la línea del horizonte.
9 de marzo. superluna . Será la segunda superluna del año.
7 de abril; Perigeo lunar (tercera Superluna) . A las 20 horas del Horario Central Europeo la luna se situará a 356.907 km de la Tierra lo que supone la distancia menor entre ambos cuerpos celestes. Esto se traducirá en la mayor superluna del año y en mareas vivas en las costas.
22 y 23 de abril; Líridas . Esta lluvia de estrellas, que recibe su nombre de la constelación de la Lira (porque de ahí parecen surgir los meteoros), procede de las partículas que deja a su paso el cometa Thacher, que visita el Sistema Solar cada 415 años, Esta nube de escombros ingresa en la atmósfera generando una lluvia de estrellas que se prolonga por buena parte del mes de abril aunque su pico se producirá en las madrugadas del 22 y 23 c.
24 abril; máxima elongación de Venus . El fenómeno tendrá su pico máximo en el atardecer del 24 de abril, pero el planeta Venus tendrá un mes de lo que algunos denominan ‘noches gloriosas’. El planeta más cercano a La Tierra presenta su mayor grado de ‘separación’ aparente con el sol, por lo que brillará con intensidad varias horas antes de ponerse por el occidente. En esta ocasión, nuestro vecino se sitúa muy cerca de las Pléyades, algo que se volverá a repetir dentro de seis años.
6 y 7 de mayo; Eta Acuáridas . Esta lluvia de estrellas no es demasiado espectacular, pero tienen su origen en uno de los cuerpos celestes más célebres del mundo: el cometa Halley. Aunque se puede ver desde casi todo el mundo, en este caso se trata de un fenómeno especialmente visible desde el Hemisferio Sur.
7 de mayo; Superluna . Será la cuarta y la última de las superlunas del año.
21 de junio; Eclipse solar anular . Será visible desde la costa Este de África, Medio Oriente, el centro y el sur de Asia y los océanos Índico y Pacífico. Este fenómeno se produce cuando la luna se interpone entre el Sol y La Tierra pero la distancia entre nuestro planeta y su satélite es lo suficientemente grande como para no poder tapar del todo el disco solar. Es un fenómeno espectacular que, por desgracia, no podrá verse en Europa occidental.
5 de julio; Eclipse lunar penumbral . Será visible desde el Archipiélago canario ya que podrá verse desde el oeste del continente africano en su fase final. Este eclipse parcial también se verá en América (Norte y Sur), y en los océanos Atlántico y Pacífico.
28 y 29 de julio; Delta Acuáridas . Al igual que sucede con la lluvia de estrellas Eta Acuáridas, este fenómeno es mucho más intenso en el Hemisferio Sur que en el Norte.
12 y 13 de agosto; Perseidas . Una de las mejores y más visibles lluvias de estrellas que pueden verse desde los dos hemisferios. Las conocidas como ‘lagrimas de San Lorenzo’, por la proximidad de esta festividad católica, tendrán este año óptimas condiciones de visibilidad, por lo que serán uno de los grandes espectáculos astronómicos del año. Esta lluvia de meteoros se produce por la intersección de la órbita terrestre y los restos de la estela del cometa Swift-Tuttle (nos visita cada 135 años), aunque ya desde tiempos muy remotos el fenómeno se interpretó de manera mitológica y religiosa.
19 y 20 de octubre; Oriónidas . Al igual que sucede con las Eta Acuáridas, esta lluvia de estrellas se debe al rastro de la estela del Halley aunque, a diferencia del evento de mayo se puede ver con intensidad desde los dos hemisferios.
13 y 14 de diciembre; Gemínidas . Este año se dará una feliz conjunción de circunstancias: la primera es que esta es una de las lluvias de estrellas más intensas del año (muchos la llaman la reina) y la segunda es que la luna no estorbará en lo que será uno de los grandes espectáculos astronómicos del año. Aunque su intensidad es mayor en el Hemisferio Norte, también puede verse al sur del Ecuador.
14 de diciembre; Eclipse total de Sol . Es el gran evento del año. Y sonríe, otra vez, a Argentina y Chile, que serán los que podrán disfrutar del fenómeno en su máxima intensidad. El fenómeno recorrerá el Pacífico y se internará en La Patagonia antes de cruzar el Atlántico para terminar sobre tierras africanas (Namibia, Angola y sudeste de Sudáfrica de manera parcial) poco antes del atardecer. En América del Sur también se podrá ver de manera parcial en Bolivia, Paraguay, Uruguay, Brasil, Ecuador y Perú.
21 de diciembre; Gran conjunción de Júpiter y Saturno . Este fenómeno se produce cada 20 años y el tamaño de los dos protagonistas del evento hace que se pueda ver a simple vista.
Fotos bajo Licencia CC: Abel Pardo López ; Andrés Nieto Porras ; liz west ; European Southern Observatory