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Cantabria sufre la mayor pérdida de población desde el año 1996

La cifra oficial de población de Cantabria se sitúa en los 588.656 habitantes a 1 de enero de 2014, lo que supone un descenso de más de medio punto (-0,55%) respecto a la misma fecha de 2013. En total, 3.232 vecinos menos. Es la mayor pérdida de población registrada en la comunidad desde que existe el actual Padrón Continuo de Habitantes -1996-, y supone una caída en el número de residentes por segundo año consecutivo.

Así lo señala el Instituto Cántabro de Estadística (ICANE) en el Boletín de Síntesis Demográfica publicado este jueves, que estudia la evolución demográfica de Cantabria y que deja un panorama poco alentador. La comunidad retrocede a niveles poblaciones de 2008; la tasa de envejecimiento continúa en aumento mientras el número de nacimientos desciende considerablemente y crece el número de personas en edad de trabajar que buscan un futuro fuera de las fronteras de la región.

Todos estos factores han provocado que a día de hoy Cantabria no tenga garantizado el recambio generacional, tal y como advierte el informe consultado por eldiario.es Cantabria. El Índice de Recambio -menores de 10 años por cada 100 mayor de 74 años- supera en la comunidad el umbral de 100, con un 114%, quince puntos más que en España, donde se queda en el 90,1%.

Como consecuencia de la pérdida de población, el balance de los últimos cinco años pasa a ser negativo por primera vez. En este descenso influye tanto la pérdida de población extranjera, que retrocede hasta el 9,8%, como el estancamiento del crecimiento de la población española, el 0,1%. Así, la inmigración descendió un 17% y la emigración aumentó un 5%, especialmente entre los menores de 34 años.

También en el conjunto de España se observa una pérdida de habitantes, en este caso ligeramente mayor a la regional (-0,79%). No obstante, en comparación con la media de las comunidades autónomas, Cantabria continua presentando en todos los casos tasas estructurales menos favorables: la de juventud es menor, la de envejecimiento muy superior, y los índices de longevidad, recambio y dependencia siguen siendo mayores.

Despoblamiento de las zonas rurales

Territorialmente la población empadronada en Cantabria continúa distribuyéndose de forma muy desigual. Casi 9 de cada 10 habitantes -el 87%- se concentran en los 49 municipios de la costa. No obstante, este área ha vuelto a perder vecinos, con una variación negativa del 0,47%. En los valles interiores ese descenso fue de más del doble (-1,1%), un valor próximo al del año anterior.

Y al igual que sucede en la zona costera, en el área interior solo crece una zona, el Valle del Saja, que aumentó su población en apenas un 0,1%. Del resto destacan los crecimientos negativos de valles altos del Pas y del Miera con -1,7%, valle alto y medio del Besaya (-1,4%) o Campoo y los valles del Sur (-1,3%), lo que agrava aun más el problema de la despoblación de las zonas rurales de la Comunidad.

La desigualdad de la población en las distintas áreas es aún más acusada si la desglosamos por municipios. En tan solo 5 municipios de los 102 de Cantabria, se concentra el 54% de los residentes, todos ellos con más de 20.000 habitantes (Camargo, Castro Urdiales, Piélagos, Torrelavega y Santander). Concretamente, la capital representa el 30% de la población total de la región.

En estos municipios más poblados, solo aumentó su población Piélagos (1,4%), mientras el resto presentó variaciones negativas, en todo los casos superiores al medio punto porcentual, siendo Torrelavega la ciudad que más perdió (-1,2%), seguido de Camargo (-1%), Santander (-0,8%) y Castro Urdiales (-0,5%).

Movimientos interiores

Entre los cambios de residencia registrados dentro de la propia comunidad, la mitad de los municipios presentaron saldos negativos, siendo los más destacados los de Camargo (-169), Torrelavega (-132), Santander (-117), Los Corrales de Buelna (-50) y Liérganes (-39). En el lado opuesto, aquellos con saldos positivos más altos fueron Piélagos (247), El Astillero (132), Entrambasaguas (101), Santa Cruz de Bezana (100) y Suances (65), todos ellos municipios situados en el área costera.

En el interior, los municipios que presentan saldos más favorables son Cabezón de la Sal (44), Santiurde de Toranzo (31) y Mazcuerras (23), que son responsables de que el Saja sea la única zona interior sin pérdidas de población.

Envejecimiento

Otro de los datos más significativos del informe elaborado por el ICANE es el aumento por quinto año consecutivo de la tasa de envejecimiento tras un periodo, entre 2003 y 2009, marcado por el descenso. A 1 de enero de 2014, dos de cada diez habitantes de Cantabria tienen 65 o más años.

Así, mientras la tasa de envejecimiento aumenta en medio punto, hasta situarse en el 19,8%, la de juventud tan sólo lo hace en una décima y se queda en el 13,6%. Los municipios más jóvenes de la comunidad son Cartes (19,8%), Piélagos (19,6%) y Entrambasaguas (17,9%).

Este mínimo incremento de la tasa de jóvenes, junto al aumento de la de mayores, indican que el aumento del envejecimiento de la población está asociado a un descenso del grupo de personas en edad de trabajar. Este colectivo, que abarca de 15 a 64 años, desciende en más de 5.600 habitantes.