Los mástiles rotos, la madera levantada y podrida y los paneles explicativos resquebrajados. El deterioro de los galeones de Vital Alsar, en el denominado Museo 'El Hombre y la Mar', en la península de la Magdalena, ya no afecta solo al ornato de los buques, sino que se extiende a los elementos constitutivos de su estructura. El Ayuntamiento de Santander no tiene claro si va a intervenir o no, pero desde la oposición regionalista y socialista se reclama insistentemente que se haga de forma urgente para que se dignifique el legado del navegante.
El Museo 'El Hombre y la Mar' es una exposición al aire libre que reúne diferentes elementos que homenajean las nueve expediciones realizadas entre 1966 y 1992 por el navegante santanderino Vital Alsar. Conforman esta muestra los tres galeones que Vital Alsar utilizó en sus aventuras oceánicas, una réplica de la balsa de madera con la que cruzó el Pacífico en 1970, una burbuja de salvamento, un mapa de bronce que muestra algunas de las rutas realizadas por Alsar y una sirena de bronce. Con los galeones atravesó el Océano Atlántico de Tampico (México) a Santander en 1978.
La oposición regionalista y socialista ya ha demandado una intervención urgente, pero la alcaldesa de Santander, Gema Igual (PP), ha postergado a septiembre la toma de una decisión sobre la recuperación de los galeones.
PSOE
En junio pasado, el Grupo Socialista llevó al pleno municipal el ruego para que se mantengan “en buen estado” los galeones del navegante Vital Alsar. La concejala Concha González realizó esta petición, que incluía la demanda de un plan de mantenimiento y conservación permanente, así como la solicitud para que “los talleres municipales realicen de forma inmediata una valoración exhaustiva y una rehabilitación integral de las naves” con las que Vital Alsar cruzó los océanos.
“Nos preocupan las declaraciones del Partido Popular sobre la posibilidad de valorar si rehabilitan estos galeones o no después del verano”, ha criticado la concejala.
Para González, “el estado de deterioro que presentan actualmente los tres galeones de Vital Alsar es motivo de gran preocupación para todos los santanderinos y para la comunidad internacional que aprecia la labor y el legado de este ilustre marino”.
En este sentido, González ha afirmado que “los galeones no solo son un testimonio del legado de Vital Alsar, sino también un símbolo del espíritu aventurero y la herencia marítima de Santander. Su conservación y puesta en valor son responsabilidad de todos nosotros”.
PRC
El PRC de Santander ha pedido este viernes al equipo de Gobierno que lleve a cabo una intervención “inmediata” ante el “evidente deterioro del entorno con riesgo incluso para los vecinos y turistas que visitan el enclave”.
El portavoz del PRC, Felipe Piña, ha expresado su malestar por “la imagen que este abandono da del Santander más turístico” y ha señalado que se trata de “una muestra más del desprecio del equipo de gobierno hacia el patrimonio de la ciudad e incluso también hacia el legado de Vital Alsar”.
Piña ha señalado que “en toda la zona se puede apreciar la falta de mantenimiento por parte del Ayuntamiento con la balaustrada sucia y rota, falta de pintura, maderas en mal estado, inclinaciones indebidas de los galeones y elementos estructurales con peligro de caída o rotura”.
Para el regionalista, los galeones “son parte de nuestra identidad, de nuestro patrimonio y el legado del gran Vital Alsar y se están cayendo delante de nuestros ojos ante la pasividad del Ayuntamiento de Santander”.
Piña ha criticado que el equipo de gobierno deje para después del verano la intervención y lo vincule a un informe de talleres cuando es “evidente que el estado de los galeones requiere una intervención inmediata e incluso podría suponer el cierre de la zona viendo el estado de alguno de los elementos que lo componen ya que pueden suponer un peligro para los visitantes y vecinos que se acercan a conocer el legado de nuestro ilustre paisano Vital Alsar”.
Piña ha recordado que ya en el pasado se tuvieron que movilizar los santanderinos para que el Ayuntamiento acogiera estos galeones y se comprometiera con su mantenimiento, ya que en 1979 una “marea popular”, (con la recogida de más de 4.000 firmas) encabezada por la poeta Marisa Del Campo, “logró implicar al Ayuntamiento en la creación de este museo al aire libre inaugurado en 1980”.
Expediciones
La primera expedición del santanderino ya desaparecido fue con 'La Pacífica', una balsa que naufragó en aguas próximas a las islas Galápagos, tras cinco meses de navegación, en 1966.
Cuatro años más tarde, a bordo de 'La Balsa', culminó con éxito su travesía entre Guayaquil (Ecuador) y Mooloolaba (Australia), estableciendo el récord de navegación más larga a bordo de una embarcación de este tipo.
En 1973, repitió la experiencia, pero con tres embarcaciones, en una nueva expedición bautizada 'Las Balsas', que partió de Guayaquil y concluyó en Ballina (Australia), tras 179 días de navegación.
Cuatro años más tarde, inició su expedición 'En la Estela de Orellana', emulando al extremeño que había descubierto el río Amazonas, cuatro siglos antes. Vital y sus hombres recorrieron 800 kilómetros, atravesando los Andes, y llegaron al nacimiento del río, donde construyeron tres galeones con los que descendieron por sus aguas hasta Belén do Pará (Brasil). Un año después, tras numerosas dificultades, regresaron a Santander.
La expedición 'La Marigalante' fue un homenaje a su paisano Juan de la Cosa, el primer cartógrafo de América y propietario de la nao Santa María, con la que Colón descubrió América. Con la 'Marigalante', Alsar, en 1987, surcó nuevamente el Atlántico, desde México hasta Santoña, lugar de nacimiento de Juan de la Cosa. Con la misma nave, Vital realizó varios viajes, visitando Japón y participando en los actos conmemorativos del Quinto Centenario del Descubrimiento de América.
Su última gran expedición, 'El Zamná' (2009), le llevó de Cozumel a Atenas, a bordo de un trimarán construido que pretendía ser un homenaje a las grandes civilizaciones de la historia que han navegado por todo el mundo.