La actuación forestal que se está llevando a cabo estos días en el entorno de la playa de Loredo, en Ribamontán al Mar, no ha pasado desapercibida para vecinos y habituales a este paraje, lo que ha encendido todas las alarmas sobre el futuro que espera a este bosque situado junto al mar, en el que se han practicado “talas indiscriminadas”, según denuncian los grupos ecologistas.
Ante el corte de árboles de gran tamaño, y a la vista de la confusión entre las distintas administraciones implicadas -Ayuntamiento de Ribamontán al Mar, Demarcación de Costas o Dirección General de Montes-, que no aclaran si existen todos los permisos necesarios para seguir adelante con esta actuación en una finca de titularidad privada, varios vecinos y miembros de distintas organizaciones conservacionistas están llamando a la acción para evitar que el daño sea irreparable.
Para ello, han convocado una reunión informativa este domingo, en el Surf Café de Somo, a partir de las 11.30 horas, y se hará una quedada a las 12.00 horas en el mismo bosque para recabar apoyos y organizar la lucha contra esta actuación forestal muy contestada en el municipio.
La playa de Loredo tiene algo más de un kilómetro de longitud y es una de las más apreciadas y admiradas por los cántabros. Está situada a continuación de El Puntal y la playa de Somo, formando un inmenso arenal, en un enclave natural espectacular, con la isla de Santa Marina al frente, los acantilados, el sistema dunar y el bosque sobre el que ahora se está actuando.
A través de las redes sociales se han difundido imágenes en las que se observa a varias personas desmochando con maquinaria pesada los ejemplares, en su mayoría pinos. Los vídeos de la tala se han hecho virales en internet y, ante el estupor y la indignación mostrada por los ciudadanos, que tachan la actuación de “vergonzosa”, el Ayuntamiento ha hecho público un bando en el que informa de que el terreno es “privado” y que el propietario tiene la “correspondiente autorización”.
En la misma resolución, el alcalde, Francisco Asón (PRC), recuerda que el arbolado existente en esa zona fue plantado en los años 20 y que desde entonces se han realizado diversas cortas de pino y eucalipto, “la última hace unos 20 años en gran parte del monte”.
Recogida de firmas
Además, también a través de internet se ha iniciado una recogida de firmas que denuncia que “se está talando salvajemente el único bosque de Loredo que queda, hogar de diferentes especies autóctonas y parte de nuestro característico paisaje”.
En este texto, que ya han suscrito cerca de 3.000 personas, recuerdan que parte de la finca está afectada por la servidumbre de protección de la Ley de Costas y “ni la Consejería ni el Ayuntamiento tienen competencias para actuar allí” y que “todo el monte está recogido en el Plan de Ordenación del Litoral de Cantabria como Actuación Integral Estratégica Ambiental”.