Las Plataformas de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Santander y Torrelavega se han unido este martes para ocupar de forma pacífica y “acampar de forma permanente” en la sucursal de Liberbank en la calle Amós de Escalante de Santander y protestar así contra los desahucios. Tras ser desalojados por la Policía, han repetido la misma acción en la oficina de la calle Burgos de Santander, de donde han sido expulsados a la hora del cierre de la sucursal.
Más de una veintena de activistas de esta plataforma cántabra que lucha contra los desahucios han protestado de esta forma por la “falta de interés” de la dirección de Liberbank y de la Consejería de Vivienda de Cantabria por reunirse con la PAH. “Solicitamos una reunión a tres bandas para intentar resolver los casos que tenemos pendientes”, ha explicado Óscar Manteca, uno de los portavoces del colectivo, quien asegura haber iniciado las peticiones para realizar este encuentro “hace más de mes y medio”.
A pesar de sus reiterados intentos, los activistas antidesahucios no han obtenido respuesta de ninguna de las partes. “Por eso venimos a acampar. Venimos con los sacos de dormir y con la intención de quedarnos en la oficina hasta que nos hagan caso”, anunciaron al inicio de su concentración.
Además, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca ha protestado por los desahucios que están sufriendo muchos vecinos de Cantabria y por las “titulizaciones” de las hipotecas por parte de las entidades bancarias, es decir, su venta a los denominados fondos 'buitre', motivo que ha llevado a la plataforma cántabra a unirse a la PAH estatal para denunciar esta práctica ante los jueces decanos de Cantabria.
Sin embargo, varias horas después de que se iniciase la protesta -que se ha desarrollado sin incidentes-, los agentes de la Policía Nacional han acudido a la sucursal avisados por la dirección del banco –dirección que ha obstaculizado la labor de los periodistas gráficos plantándose delante de sus objetivos y alegando estar también ejerciendo sus derechos-.
Después de varios forcejeos con los reticentes a abandonar la sucursal y bajo las protestas y gritos de los muchos viandantes que se han parado a apoyar a los activistas, las fuerzas del orden han desalojado por la fuerza a todos los integrantes de la PAH que aún permanecían en el interior.
Además, ha tomado los datos a los activistas y ha amenazado a los que ha desalojado por la fuerza con multas por la Ley Mordaza. Sin embargo, la plataforma ha advertido a través de un comunicado que esta ha sido “la primera de muchas otras acciones sin anunciar que buscan que un banco rescatado con dinero público y que antaño era caja de ahorros, resuelva los seis casos pendientes y que piden reestructuraciones, daciones en pago y alquiler social”.
Asimismo, han exigido la “total implicación” del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla (PRC), al que solicitan que llame “de inmediato” al consejero delegado de Liberbank, Manuel Menéndez, para que esta situación “se desatasque”. “La PAH está dispuesta a encerrarse donde haga falta para lograr que se produzca la reunión solicitada”, han advertido.
Todos los integrantes de la protesta han sufrido de una manera u otra la tragedia de los desahucios. Gema María Abad, procedente de Noja, forma parte “desde hace poco” de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Compró un piso a medias con su pareja, con la que pagó ocho años de hipoteca antes de su separación. “De 150.000 euros de hipoteca aún tengo que pagar 130.000 más los costes de los retrasos y, a día de hoy, la casa está tasada en la mitad de lo que costó en 2007”, explica como ejemplo. La activista defiende que ella “paga lo que puede”, pero que los intereses generados por el retraso hacen “inasumible” la hipoteca, “Liberbank no da ninguna opción, no negocia. Pagar la deuda o el embargo del piso, eso es lo que nos ofrece”.