La suspensión judicial de las primarias de Podemos Cantabria retrasa al menos dos meses la elección de candidato para 2019
Podemos Cantabria prolongará su vorágine interna al menos otros dos meses más. La suspensión por parte del Juzgado de Primera Instancia Número 6 de Santander de las primarias del partido demorará la elección de candidato o candidata para las elecciones autonómicas de 2019 casi con total seguridad hasta enero.
Las medidas cautelares adoptadas tras las acciones judiciales presentadas por la secretaria general, Rosana Alonso, el secretario de Organización, David González, y la responsable de Feminismo, Belén Milán apartados de los comicios dan un giro a los acontecimientos y retroceden el proceso casi a la casilla de salida, al 9 de noviembre, días antes de que se cerrara el plazo para inscribir candidaturas.
De esta forma, a pesar de que ese plazo expiró el domingo, cuando la única candidatura oficial registrada era la de la diputada autonómica Verónica Ordóñez, todo vuelve a quedar en el aire a la espera de que se resuelva el proceso judicial que determinará si se violaron los derechos fundamentales de los tres miembros del partido inhabilitados por el Comité Electoral regional.
Actualmente, según ha precisado este martes en rueda de prensa el abogado Iván Gutiérrez, existen otros dos procesos abiertos además del de las medidas cautelares, que se encuentra a la espera de que se presente la demanda principal en el plazo máximo de 20 días. Se trata de una denuncia por revelación de secretos por la vía penal y un inicio de trámite de querella por injurias y calumnias, impulsada esta última por Milán.
Los tres demandantes han asegurado en su comparecencia que han agotado todo el procedimiento interno antes de llegar a la vía judicial, después de haber recurrido la decisión del Comité Electoral Regional al de Garantías Estatal y que este ratificase la inhabilitación, con tres votos a favor de rechazar las alegaciones y dos en contra, con votos particulares que señalaban que “se vulneraban los derechos fundamentales” de los tres miembros de la formación morada apartados de las primarias.
“El auto emitido este lunes confirma que hay razones suficientes para considerar que se ha producido una vulneración del sufragio pasivo”, ha subrayado la responsable de Feminismo, remarcando que no forman parte del informe realizado por el Comité de Seguridad y Salud en el Trabajo, a raíz de la denuncia por acoso laboral contra el diputado José Ramón Blanco interpuesta por tres mujeres del partido.
Por su parte, la secretaria general del partido y candidata excluida de los comicios ha reiterado su pretensión de que “se esclarezca esta situación y que los inscritos de Cantabria puedan votar con garantías”. “De no ser así se debilita a Podemos Cantabria y a todo el proyecto de Podemos cuyo ADN es la participación y la democracia”, ha explicado Alonso.
Asimismo, ha vuelto a cargar contra la dirección nacional señalando que “es lógico y positivo discrepar”, pero que no lo son “los pasilleos y los chanchulleos”. “No se pueden hacer acusaciones graves o utilizar procedimientos de medidas disciplinarias sin ninguna rigurosidad por cuestiones de discrepancias internas”, ha criticado, calificando de “incomprensible” que personas que no han sido “acusadas de nada” hayan sido condenadas.
Presupuestos y confluencia
Con este nuevo escenario, la delicada situación que atraviesa el partido parece no hallar una luz al final del túnel. Al menos otros dos meses por delante que estarán marcados por la división interna y la falta de liderazgo que marque el rumbo y las pautas a seguir en un momento político clave.
Por un lado, el panorama del grupo parlamentario pone en peligro su participación en la negociación presupuestaria, con una diputada enfrentada con la dirección autonómica y un diputado de baja laboral que, aunque anunció su renuncia al acta, no acaba de hacerla efectiva.
No obstante, la secretaria general, cuestionada por estos asuntos, se limita a asegurar que la situación “no es la más idónea” pero que “de cara a los presupuestos no va a haber ningún problema”, a pesar de que Revilla ha señalado como un escollo para las conversaciones la falta de interlocutor válido en la formación morada. Y sobre el diputado José Ramón Blanco, que fue su principal apoyo para ganar las primarias de mayo, explica que se enteró “por la prensa” de su baja médica.
Y por otro lado, la falta de cabeza de lista a pocos meses de las autonómicas también pone en riesgo la confluencia con otras fuerzas de izquierdas como IU y Equo, quienes suspendieron las negociaciones para ese cometido a la espera de que el partido morado solucione sus problemas internos y a los que este nuevo escenario podría llevarles a tomar la decisión de romper definitivamente el posible acuerdo para concurrir en solitario a las urnas.