La tormenta política desatada en Cantabria por el expresidente autonómico y exlíder del PP, Ignacio Diego, anunciando su retirada en 2019 y proponiendo como candidato del partido en las próximas elecciones autonómicas al actual ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ante lo que califica como “escaso atractivo” de María José Sáenz de Buruaga como cabeza de lista, ha provocado una catarata de reacciones, incluida la negativa del propio De la Serna a regresar a la comunidad autónoma.
Y es que la petición de Diego, que ha mantenido siempre una relación muy tensa con el exalcalde de Santander, era un regalo envenenado, que pretendía dañar al mismo tiempo en su despedida a sus dos máximos enemigos políticos: por un lado, porque De la Serna lleva poco más de un año como ministro y no tiene interés real en volver; y por otro, porque evitaría que Buruaga fuera candidata en 2019, a pesar de ser la presidenta del PP de Cantabria tras derrotarlo en el Congreso Regional por tan solo cuatro votos de diferencia.
Sin embargo, el movimiento estratégico de Diego a través de Facebook, donde ha anunciado de manera consecutiva tanto su renuncia como su preferencia por De la Serna como futuro candidato, ha quedado desactivado prácticamente de forma inmediata, porque el propio ministro se ha descartado como cabeza de cartel y ha cargado contra Diego, al que ha pedido que sea “leal” con la actual dirección que encabeza Buruaga desde el mes de marzo.
“Mi papel está en el Ministerio de Fomento, cumpliendo con las responsabilidades como ministro del Gobierno de España y tratando de no defraudar la confianza del presidente Mariano Rajoy”, ha subrayado De la Serna como respuesta tras un acto público en la sede de su departamento en Madrid.
En esta misma línea, el dirigente popular ha asegurado que “cualquier otra decisión” que tome el PP “tendrá que ser fruto de un debate de los órganos de Gobierno del partido” y considerando la opinión y decisiones que tome la actual presidenta del partido en Cantabria, María José Sáenz de Buruaga. “Es una gran presidenta que está haciendo una extraordinaria labor”, ha recalcado al respecto.
“Al resto de afiliados lo que nos corresponde es ponernos a disposición de la presidenta para ver en qué forma podemos aportar al partido y de qué forma podemos trabajar también con lealtad política para conseguir un proyecto que ilusione a los cántabros”, ha remachado Íñigo de la Serna. “De momento, es todo lo que tengo que decir”, ha zanjado.
Reacción en cadena
Que el ofrecimiento de Ignacio Diego no era casual y formaba parte de una estrategia de más largo recorrido ha quedado claro a lo largo de la jornada, con la reacción en cadena de dirigentes del PP muy cercanos en lo político y en lo personal al expresidente popular, como el actual portavoz parlamentario, Eduardo Van den Eynde, o los diputados José Manuel Igual y Santiago Recio.
Todos ellos, en declaraciones a Europa Press, han manifestado que consideran que el ministro de Fomento y exalcalde de Santander, Íñigo de la Serna, debe ser el candidato del partido a la Presidencia de la comunidad autónoma en las elecciones autonómicas de 2019.
Por ejemplo, José Manuel Igual, que además de diputado es alcalde de Arnuero, también es partidario de que De la Serna sea el candidato en 2019 puesto que “es un”valor de primerísimo orden“ en el partido, a nivel nacional o regional. ”Si el entrenador del Barcelona o del Madrid tiene un partido importante no se le ocurre dejar a Messi o Ronaldo en el banquillo“, ha defendido empleando este símil futbolístico.
Sin embargo, muy distinta es la opinión de su hermana, la actual alcaldesa de Santander, Gema Igual, que también se ha pronunciado públicamente al respecto y que ha afirmado que no le parece bien que Diego “ensombrezca” la gestión de la nueva dirección del PP, encabezada desde marzo por quien fuera la mano derecha del expresidente y número dos del Ejecutivo que presidió la pasada legislatura.
“Tener a Íñigo en el Gobierno de España es una oportunidad para Santander y para Cantabria. Me parece que Íñigo está muy bien donde está”, ha resumido Igual para zanjar el tema y pedir respeto la decisión de De la Serna de no ofrecerse como candidato a las elecciones autonómicas de 2019, una teoría que había cobrado fuerza en las últimas semanas dada la intensa agenda en Cantabria que está desplegando el ministro con continuos anuncios de inversiones y actos públicos con él como protagonista.