Cantabria ya no cuenta con profesionales sanitarios contagiados de COVID-19 tras más de tres meses de pandemia

Cantabria ha dado un paso más, que podría calificarse de gigante, en el control de la pandemia del coronavirus extendida por todo el mundo. Y es que desde esta semana, la comunidad ya no cuenta con profesionales sanitarios infectados de COVID-19 tras más de tres meses desde el primer contagio, datado del 12 de marzo.

Y es que lo sanitarios, que han tenido que enfrentarse al virus en primera línea de fuego, son uno de los colectivos profesionales más golpeados por la pandemia, sobre todo al principio, cuando escaseaba el material de prevención en toda España. Y aunque Cantabria no ha sido de las más golpeadas en ese sentido, la cifra de infectados, que se sitúa en 455 -según datos del Servicio Cántabro de Salud (SCS)-, supone un 15% del total de positivos registrados desde el inicio de la crisis sanitaria (2.983).

En los momentos más críticos, el número de sanitarios de Cantabria contagiados llegó a crecer en 14 de un día para otro, concretamente de la jornada del 1 al 2 de abril, que la comunidad pasó de 133 a 147 profesionales de este sector con COVID-19. Así todo, desde finales de mayo, aunque el cómputo global ascendía a 439, los casos activos ya estaban por debajo de la decena, descendiendo progresivamente hasta, en pocos días, situarse en uno o dos.

Y así se ha mantenido este dato en la comunidad durante casi un mes, desde el 28 de mayo, con la excepción de una jornada, la del 8 de junio, en la que hubo tres casos activos. Y el día 21, por primera vez desde hace más de tres meses, Cantabria ya no contó con ningún sanitario activo, tendencia que se mantiene.

Los contagios se han producido pese al esfuerzo de la Consejería de Sanidad por realizar pruebas de detección a estos profesionales. Concretamente, según datos ofrecidos por este departamento a eldiario.es, se han llevado a cabo 16.310 test, de los cuales 6.763 han sido mediante PCR y 9.547 a través de detección de anticuerpos (serología). Los resultados han desprendido un total de 245 casos mediante PCR, y sumando los de serología la cifra asciende a 545.

Por otro lado, las residencias, otro de los principales focos de contagio, siguen descendiendo el número de casos activos entre su personal y usuarios. Y es que de los 765 casos totales que hay registrados desde el inicio de la crisis, tan solo quedan siete activos, según el último dato proporcionado por el Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS).