El representante de los grupos ecologistas y conservacionistas de Cantabria en el Patronato del Parque Natural de Oyambre, Emilio Carrera, y Ecologistas en Acción Cantabria han denunciado que el sistema dunar de Oyambre no se haya incluido como Lugar de Interés Comunitario (LIC) a regenerar por el Proyecto ARCOS, financiado por el programa comunitario Life+, porque está “demasiado destrozado”.
De este modo, los ecologistas se han sumado a la denuncia realizada por el reconocido especialista en temas ambientales y de gestión sostenible de los recursos marinos, escritor y dibujante, Fernando Arbex, quien bajo el título 'Oyambre pierde el tren. Las paradojas del medio ambiente europeo', ha puesto en evidencia “las negligencias e inhibiciones del Gobierno de Cantabria” en la gestión del sistema dunar y los arenales de Oyambre, según han señalado los conservacionistas en un comunicado.
El Proyectos ARCOS, puesto en marcha hace cuatro meses, liderado por la Universidad de Oviedo y gestionado desde el Jardín Botánico de Gijón, pretende restaurar, repoblar y regenerar diez sistemas dunares españoles de las costas del Mar Cantábrico en el País Vasco, Cantabria y Asturias. Los diez sistemas son LICs y forman parte de la Red Natura 2000. El objetivo es recuperar y asegurar la biodiversidad vegetal en estas dunas atlánticas mediante una inversión de 1,3 millones de euros, de los que 945.428 son aportados por la Unión Europea.
A Cantabria le corresponde la regeneración de los LIC dunares de Berria, Liencres y Somo, unos sistemas que, según los citados ecologistas, “no están escandalosamente deteriorados”. Al respecto, han afirmado que en los tres casos cántabros se trata de dunas que “solamente requieren más protección contra aparcamientos salvajes, probar métodos innovadores de captación de arena, extirpar vegetales inapropiados, la reintroducción de plantas dunares autóctonas para conservar un hábitat prioritario, y el cercado perimetral del área tratada, para evitar el pisoteo”.
Sin embargo, ha sido excluido de la lista de beneficiarios el LIC Rías Occidentales y Dunas de Oyambre, uno de los sistemas dunares atlánticos europeos “más contaminados, erosionados, desfigurados y agredidos de la Unión Europea”. En su opinión, se ha “dado la espalda” porque está “demasiado destrozado, demasiado desfigurado por intereses privados, demasiados políticos inútiles rondando, demasiadas complicaciones”.
“Oyambre se ha convertido en la imagen más clara de la desidia ambiental española y comunitaria. Si verdaderamente Europa y España desearan proteger sus dunas atlánticas, Oyambre sería el gran protagonista del proyecto ARCOS de Life+. Pero el reto es excesivamente grande”, han subrayado.
Al respecto, los ecologistas han denunciado que el LIC Rías Occidentales y Dunas de Oyambre es “un forúnculo supurante e infecto en plena Red Natura 2000”, donde “se mantienen diques que sedimentan humedades (dique de Sniace), se consienten chiringuitos y campings contaminantes”, se mantiene activo un campo de golf encima de la duna, se remueven las arenas de la duna con palas excavadoras para mantener un aparcamiento, se rellenan humedales con piedras para montar encima carreteras, se desvían a sus arenas los purines de varias vaquerías y se toleran escolleras privadas, a pesar de sentencias judiciales que nadie obedece“.
El Parque Regional que alberga este LIC tardó seis años en ver aprobado su Plan de Ordenación de Recursos Naturales y tiene aún pendiente de aprobar el Plan Rector de Uso y Gestión, en ausencia del cual “se cometen toda suerte de tropelías”. “El objetivo final de los políticos locales y regionales parece ser el permitir y estimular su completa degradación, hasta que se decida retirar la actual protección europea”, han sentenciado.