El 25N cántabro exige respaldo político y judicial contra las violencias sexuales para “perder el miedo a denunciar”

En el Día Internacional contra la Violencia de Género, las mujeres han vuelto a tomar las calles de Cantabria para reclamar la erradicación de esta lacra. La principal manifestación de este 25N cántabro, como es habitual, ha discurrido por las calles de Santander, donde a través de pancartas, consignas y carteles, las asistentes han exigido el fin de la violencia y los asesinatos machistas.

Convocada por la Comisión 8 de marzo, por el grupo feminista Percumozas y por las Asambleas Feministas Abiertas, la marcha se ha desarrollado desde Puertochico hasta el Ayuntamiento. '¡Basta ya! Paremos la violencia contra las mujeres' y 'Juntas, el miedo cambia de bando' han sido los mensajes de las pancartas de cabecera, aunque otros carteles han transmitido también lemas relacionados con las reivindicaciones de la jornada, que ha congregado a unas 1.200 manifestantes.

'No nací mujer para morir por serlo'; 'Mi cuerpo no es mercancía, no se vende y no se alquila'; 'Nos quisieron enterrar, pero no sabían que éramos semillas'; 'Causa más incomodidad tener una feminista que un agresor vicario en la familia' o 'Cuando culpas a la víctima apoyas al agresor', se ha podido leer en algunos de ellos.

A la llegada al Consistorio santanderino, las convocantes han leído un manifiesto en el que han recordado a las asesinadas por violencia de género, 42 en España en lo que va de año -dos de ellas en el inicio de esta semana-. En total, desde 2003, fecha desde la que hay registro oficial, son 1.286 asesinadas. Asimismo, son ocho los menores asesinados por violencia vicaria y 32 son los que han quedado huérfanos como consecuencia de la violencia machista, 465 desde 2003.

“Hemos vuelto a salir a la calle para demostrar que no queremos una mujer asesinada más, no queremos una injusticia más por el hecho de ser mujeres y lo que sí queremos es una vida libre de violencia para las mujeres, una igualdad real y efectiva, y una sociedad y un mundo más justo para todas y todos”, han exclamado las feministas cántabras.

Además, las integrantes de los colectivos citados anteriormente han exigido respaldo político -de todas las administraciones-y judicial contra las violencias sexuales para “perder el miedo a denunciar”. “Esperamos que las mujeres que están rompiendo el silencio para contar sus experiencias de violencias sexuales ayuden a otras a perder el miedo y que se sientan fuertes para hablar también”, han subrayado, añadiendo que “en la sororidad encontramos la fuerza para alzar la voz juntas”.

Así, han pedido leyes para respaldar a las mujeres víctimas de violencia machista, así como dotaciones presupuestarias específicas. Y es que en el contexto del último año en el que han salido a la luz casos de violencia de género muy mediáticos, las feministas han señalado la necesidad de que “el miedo cambie de bando” y el foco “pase de la mujer al agresor”.

“Necesitamos combatir la corriente negacionista de la violencia machista que la extrema derecha trata de extender y que perjudica su prevención, detección temprana y recuperación”, han señalado también las feministas.  

Por otra parte, también se han acordado de las mujeres que están sometidas a diferentes violencias machistas en todo el mundo, con especial énfasis en las víctimas del genocidio israelí en Gaza. “Falta mucho camino por recorrer hasta conseguir la erradicación de la violencia machista, pero somos muchas y también muchos empujando aquí y en el resto del mundo”, han sentenciado. “¡Basta ya, ni una menos, vivas nos queremos en el mundo entero!”, han concluido las manifestantes.