“Hace un tiempo me puse muy, muy, muy malita...”, así arranca el vídeo que cuenta la historia de Amara. Goitia Velategui, alumna de la escuela de teatro Miriñaque, pone la voz a este personaje, que nace para ayudar a las familias a lidiar con la difícil situación de sobrellevar el cáncer infantil. La Librería Gil acoge este viernes, a las 19.30 horas, la presentación del audiovisual.
Sara Fuentes ha sido la ilustradora encargada de dar forma a Amara, y gracias a la edición de Trevol Audiovisual, se ha podido crear el vídeo. El objetivo de este proyecto es contar, en poco más de un minuto y desde la mirada de una niña, cómo vive el proceso de la enfermedad. El dibujo animado narra desde el diagnóstico hasta la recuperación, pasando por la hospitalización, la preocupación que percibe en los padres o el tratamiento.
El personaje se llama igual que la asociación porque Amara significa “luz de mi corazón, siempre bella o sin amargura”, y ese es el motivo por el que nace el dibujo de Amara, para quitar amargura y ayudar a los niños a entender el duro curso de su enfermedad, además de ayudar a los padres a explicarles su situación y, también, dar visibilidad a esta asociación que lleva un año funcionando en Cantabria.
Esther Silván, presidenta de Amara Cantabria, ha explicado que “la visión de un niño es diferente a la de un adulto y hay que hacer un esfuerzo para ponerse en su piel y hablar su lenguaje”. Silván, además, ha anunciado que “el vídeo es la primera acción de otras muchas en las que la pequeña Amara será la protagonista”.
Entre las iniciativas que la asociación planea se incluye la publicación de un cuento infantil que “pueda ser utilizado para hablar de la enfermedad con las familias afectadas y también en los colegios con fines didácticos, sobre todo, cuando en una clase a uno de los alumnos le diagnostican un cáncer”, cuenta la presidenta de Amara Cantabria, que añade que este personaje también estará presente en las redes sociales en forma de viñetas que dibujará Sara Fuentes.
Un año de ayuda
En tan sólo un año de existencia Amara Cantabria ha recabado apoyos de diferentes sectores de la sociedad. Los recursos que se obtienen se destinan a cuatro líneas de apoyo fundamentales. La primera es el apoyo psicooncológico en Valdecilla, un servicio que desde el pasado mes de febrero presta todos los días en el hospital una psicóloga contratada por la asociación que trabaja coordinada con los equipos médicos. Apoyar a los padres cuyos hijos son ingresados en hospitales de otras comunidades como el País Vasco; humanizar las zonas oncológicas del hospital con intervenciones artísticas y talleres en verano y dar a conocer la enfermedad y su problemática a la sociedad, son otros de los objetivos de Amara Cantabria, que trabaja en permanente coordinación con la Gerencia del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla.
Entre los objetivos a medio plazo se encuentra también el de mejorar la asistencia para las familias que viven lejos de Santander y cuyos hijos tienen que estar ingresados durante largas temporadas en el centro sanitario de nuestra comunidad autónoma.