Íñigo Fernández será finalmente el portavoz del Partido Popular en el Parlamento de Cantabria y no María José Sáenz de Buruaga, como había anunciado la formación conservadora hace exactamente diez días. La presidenta de los populares cántabros ha “reconsiderado” su postura y ha renunciado a ocupar este cargo para poder dedicar más tiempo a la vida orgánica del partido, según explican desde su gabinete de prensa.
El pasado martes 18 de junio, los nueve diputados que representarán al PP en esta nueva legislatura mantuvieron su primera reunión de trabajo y en ella decidieron por unanimidad que fuese María Sáenz de Buruaga quien asumiera la portavocía. En ese mismo encuentro, que sirvió para definir la organización del grupo parlamentario, también acordaron que la secretaria general del partido, María José González Revuelta, ocupara la vicepresidencia segunda de la Mesa.
Sin embargo, este lunes, cuando los conservadores han registrado la documentación pertinente en el Parlamento, el nombre que figura en la 'casilla de portavoz' es el de Íñigo Fernández, un cambio que no ha sido comunicado públicamente.
Desde su gabinete explican que Sáenz de Buruaga ha “reconsiderado” su postura y, entre las razones, señalan que si compatibilizaba los cargos de presidenta y portavoz en la Cámara “el partido perdía una voz”. También apuntan que la portavocía roba “mucho tiempo” e implica “una dedicación plena”, por lo que la presidenta popular “no podría dedicarse al partido todo lo que requiere”.
Así, ante esta tesitura, han abogado por un cambio “lógico”, nombrando portavoz parlamentario a quien ya ocupaba la portavocía del partido, Íñigo Fernández.