Cantabria ha notificado una nueva muerte por COVID-19, la segunda consecutiva. Se trata de una mujer de 78 años, que eleva la cifra total de fallecidos durante la crisis sanitaria a 582. Este deceso se ha producido en una jornada en la que los datos reflejan que la comunidad parece estar empezando a contener el crecimiento de la incidencia y de la presión hospitalaria, aunque la situación todavía es delicada.
Así, pese a que Sanidad ha detectado este miércoles 210 nuevos positivos, la tasa de contagio a 14 días ha caído hasta los 692 casos por cada 100.000 habitantes, 15 puntos menos que hace 24 horas. Asimismo, este indicador, pero a siete días también ha bajado de 371 a 358 casos. Por su parte, la incidencia acumulada entre los mayores de 65 años se sitúa en 212 casos a 14 días y en 127 a siete.
En lo que respecta a la hospitalización, Cantabria cuenta actualmente con 112 personas ingresadas, dos menos que el martes, de las cuales 21 se encuentran en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), también dos menos. Con ello, el porcentaje de ocupación de camas convencionales es del 9,2% y el de Intensivos del 20%. La mayor parte de hospitalizados están en Valdecilla, 52 en planta y 21 en UCI, mientras que en Sierrallana hay 23 y en Laredo 16.
Finalmente, a día de hoy son 387.277 las personas vacunadas con al menos una dosis en la comunidad, lo que se traduce en el 66,4% de la población total y en el 77,2% de la población mayor de 16 años. Y son 332.360 las inmunizadas con pauta completa, el 53,9% de la población total y el 66,3% de la población diana.