El CIS pronostica una victoria electoral clara del PP en Cantabria y un batacazo de Revilla que lo aleja de la Presidencia

Cantabria

Encuesta preelectoral del CIS

El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha hecho pública este jueves la encuesta preelectoral de los comicios autonómicos y municipales que se celebrarán el próximo 28 de mayo. Este sondeo del CIS pronostica una victoria clara del PP en Cantabria, que sería la fuerza más votada con 12 o 13 escaños, y en su horquilla más alta podría formar Gobierno en Cantabria con la extrema derecha de Vox, al que le otorgan 4 o 5 diputados en el Parlamento.

También refleja un desplome del actual presidente cántabro y candidato a la reelección por el PRC, Miguel Ángel Revilla, dado que su partido tendría menos de la mitad de representantes que en la actual legislatura, quedándose en 6 o 7 y sufriendo el sorpaso del PSOE, con una estimación de 8 o 9 diputados en la Cámara. Con estos resultados, el actual bipartito quedaría lejos de poder reeditar el pacto con el que gobiernan en Cantabria desde hace ocho años, ya que la mayoría absoluta es de 18 escaños.

La irrupción de la coalición de Podemos-Izquierda Unida, que concurren por primera vez juntos en Cantabria, parece consolidada, ya que según este sondeo del CIS regresarían al Parlamento con dos o tres diputados, con lo que su participación podría ser clave en la investidura para apuntalar un futuro Gobierno tripartito junto a PSOE y PRC. En el caso de Ciudadanos, su desaparición de la Cámara se da más que por descontada y perderían los tres representantes que tienen en la actualidad.

En cuanto a los porcentajes, el sondeo del CIS otorga al PP un 31,8% de los votos, frente a un 22,8% para el PSOE, un 19,2% al PRC, un 11,9% a Vox y un 8,6% a la coalición Podemos-Izquierda Unida. La encuesta asigna a Ciudadanos un apoyo electoral del 2,3%, muy lejos del 5% necesario para obtener representación en el Parlamento de Cantabria. Más de un 25% de los encuestados está todavía indeciso, no votaría o votaría en blanco, según el estudio.

En cualquier caso, la encuesta cuenta con un intervalo de confianza del 95%, según el Centro de Investigaciones Sociológicas, y tiene un amplio margen de error, con horquillas muy amplias en la intención de voto que adjudica a cada partido. Además, la muestra es muy pequeña en lo referente a Cantabria, con un número muy limitado de encuestas, que desvirtúan históricamente las previsiones frente a los resultados electorales en las urnas.

Tendencia electoral

La encuesta preelectoral del CIS va en la misma línea de otros sondeos publicados hasta el momento, que señalan un cierto desgaste del PRC tras haberse convertido en la fuerza hegemónica en Cantabria por primera vez en su historia en 2019, cuando Miguel Ángel Revilla se alzó claramente con la victoria en los comicios autonómicos, con 14 de los 35 escaños en disputa. Las encuestas también detectan una mejora sustancial del PP, tras el batacazo que se llevó hace cuatro años, cuando obtuvo tan solo nueve representantes en el Parlamento cántabro.

En este caso, los sondeos abren la posibilidad de que la líder popular, María José Sáenz de Buruaga, recupere el primer puesto para el PP el próximo 28M, pero dibujan también un escenario muy abierto para la gobernabilidad. La desaparición de Ciudadanos, que actualmente tiene tres escaños en la Cámara, y el crecimiento de la extrema derecha de Vox, además de la irrupción de la coalición Podemos-Izquierda Unida, puede hacer insuficiente esa victoria del Partido Popular para volver al Gobierno de Cantabria tras ocho años en la oposición.

La política de pactos será fundamental tras el 28M, ya que la aritmética parlamentaria descarta mayorías absolutas y puede abrir distintas opciones en Cantabria por un puñado de votos de diferencia: desde la repetición del Gobierno PRC-PSOE que preside Revilla desde hace dos legislaturas hasta un tripartito entre regionalistas y socialistas que requiera de la participación de Podemos-Izquierda Unida, a un volantazo absoluto hacia la derecha, con un acuerdo de PP y Vox si los resultados alcanzan o, incluso, un pacto entre las dos fuerzas mayoritarias, con PRC y PP compartiendo responsabilidades en el Ejecutivo autonómico como ya ocurriera entre 1995 y 2003.