Cruz Roja Cantabria ha realizado hasta el cierre de julio más de 2.400 intervenciones en las playas de los 13 municipios de Cantabria en los que se encarga del servicio de salvamento y socorrismo este verano.
En concreto, la organización cuenta este verano con 61 puestos de socorrismo y un despliegue de 280 profesionales para velar por la seguridad y la salud de bañistas y visitantes en los municipios de Alfoz de Lloredo, Bareyo, Camargo, Comillas, Laredo, Noja, Piélagos, Ribamontán al Mar, San Vicente de la Barquera, Santa Cruz de Bezana, Santander, Santoña y Suances.
En lo que va de temporada estival, en la que la bandera verde ha ondeado el 75% de los días, los profesionales de Cruz Roja han realizado 2.416 intervenciones, un 10% más que el verano pasado (2.176), según ha informado en un comunicado Cruz Roja.
La mayor parte de las intervenciones realizadas han estado relacionadas con heridas y traumatismos leves (956 atenciones), picaduras y alergias (935, de ellas 52 son contactos con medusas) o golpes de calor, crisis de ansiedad o patologías previas cardio-vasculares, respiratorias, digestivas o psiquiátricas en las personas usuarias que manifestaron síntomas durante su estancia en la playa (234).
Entre otras intervenciones, el personal socorrista ha rescatado a 53 personas, un 33% menos que el verano pasado en las mismas fechas. También han evacuado a 71 personas a centros hospitalarios y han atendido a 56 menores en situación de extravío en la playa.
En cuanto a la presencia de medusas en las playas, el director de Socorros de Cruz Roja en Cantabria, Agustín Salán, ha indicado que “la incidencia en cuanto a picadura de medusa está siendo baja y las picaduras se han dado en playas de toda la costa cántabra de forma puntual”.
No obstante, ha señalado que “desde Cruz Roja recomendamos precaución a la hora de darse un baño y acudir inmediatamente al personal socorrista en caso de contacto o si vemos algún ejemplar”.
En cuanto a los perfiles de las personas atendidas, por un lado, mayores de 65 años, niños y niñas debido a heridas, contusiones leves, golpes de calor o extravíos, personas con patologías previas o enfermedades crónicas que se ven incrementadas por factores como el efecto de las altas temperaturas o la deshidratación y jóvenes que en algunos casos adoptan conductas inseguras por omisión o desconocimiento, como el acceso a zonas no permitidas o peligrosas, zambullidas o por alejarse demasiado de la costa.
En las playas de Los Peligros (Santander), La Salvé (Laredo) y Trengandín (Noja), se cuenta con servicio de baño adaptado, “un extra que asegura que las personas con movilidad reducida o con discapacidad puedan disfrutar de un día de playa y baño gracias a las ayudas técnicas y la asistencia del personal de Cruz Roja.
Durante este verano, 95 personas ya han utilizado el servicio de baño adaptado en estas playas a través del uso de las sillas anfibias u otras ayudas técnicas y la asistencia de socorristas para el baño.
De manera paralela, el personal de playas también realiza una importante labor de concienciación con mensajes preventivos. “La prevención es la parte más esencial de nuestro trabajo ya que los riesgos, al contrario de lo que muchas personas piensan, están en todos los baños, incluso cuando hay bandera verde. En muchas ocasiones las condiciones del mar engañan y cambian constantemente y podemos entrar en una zona peligrosa”, ha explicado.