La Policía Nacional ha detenido esta mañana a un joven de 20 años como presunto autor de la agresión a un médico y a un celador ocurrida el pasado 5 de mayo en el centro de Salud de Los Castros, en Santander. La detención se ha producido en la capital cántabra y el hombre, con antecedentes, pasará ahora a disposición judicial, han informado fuentes policiales.
Según los datos facilitados hasta ahora, el agresor acudió al centro de salud acompañando a un familiar que necesitaba atención. A ambos se les informó de que no les correspondía ese centro sanitario pero que se les iba a atender.
Ya en la sala de espera, el agresor explicó que él también necesitaba atención porque tenía un dolor de garganta. En ese momento, salió el médico y le volvió a explicar que no le correspondía ese centro y que el problema que presentaba no era una urgencia y podía esperar a recibirla en su ambulatorio.
En ese momento, este hombre propinó un cabezazo al facultativo, que cayó al suelo. Ya allí, el agresor le dio varios puñetazos, provocándole una lesión ocular con pronóstico reservado. Un celador que salió a socorrer a su compañero también resultó lesionado en el brazo y el agresor huyó antes de que se personara la Policía. Una semana después, ha sido detenido por la Policía.
Condena del Gobierno
Por su parte, el vicepresidente de Cantabria, Pablo Zuloaga, durante su comparecencia semanal para informar de los acuerdos del Consejo de Gobierno, el primero que se celebra tras el suceso, ha condenado estos hechos y deseado que “caiga todo el peso de la ley” sobre el autor de la “brutal agresión, que no cabe en la sociedad de Cantabria”.
Zuloaga ha subrayado que la sociedad de Cantabria “no tolera, no permite, no admite actitudes como éstas ante el personal sanitario del Servicio Cántabro de Salud” y ha trasladado que el Consejo de Gobierno ha tenido “palabras de acompañamiento” al profesional sanitario, “una actitud que no cabe en una sociedad como la nuestra”, ha reiterado.
El vicepresidente ha recordado que el médico agredido ha recibido numerosas muestras de afecto y acompañamiento, que ha trasladado a todos los profesionales de la sanidad pública de Cantabria, “a las que nos sumamos todos los cántabros de buena fe porque son un colectivo que nos salva la vida, que trabaja por el bienestar de todos, en el que no puede haber una actitud como ésta”, ha dicho.