La dirección nacional del PSOE se ha visto obligada a manifestarse sobre la disputa interna que se ha abierto esta semana en el PSOE cántabro de cara a la elección de delegados al Congreso Federal del partido -que reelegirá a Pedro Sánchez como secretario general-. Ferraz ha emitido un comunicado este sábado en el que niega “ni tutelas ni injerencias” a ninguna de las candidaturas cántabras que se presentan al proceso orgánico. Y es que a la lista oficialista encabezada por el secretario general, Pablo Zuloaga, le hará frente una alternativa liderada por la alcaldesa de Castro Urdiales, Susana Herrán, y respaldada por el diputado nacional, Pedro Casares.
“Sobre el supuesto apoyo, publicado este domingo en un periódico de Cantabria, de la Comisión Ejecutiva Federal (CEF) del Partido Socialista a una de las dos listas que, con toda seguridad, se presentarán para elegir la delegación del PSOE cántabro en el 41º Congreso Federal, es necesario aclarar que esa información no se corresponde con la realidad”, señala la nota de prensa de Ferraz. “En el PSOE las decisiones de este tipo las toma la militancia. Sin injerencias ni tutelas de nadie. En el momento actual estamos en un proceso para un Congreso Federal, de gran importancia para el partido en su conjunto, y la CEF del PSOE se encuentra perfectamente representada en Cantabria por el secretario general, Pablo Zuloaga”, concluye.
El paso que ha dado esta semana la regidora de Castro Urdiales ha reavivado la batalla interna en el PSOE cántabro. Y aunque en este proceso no está en juego el poder autonómico del partido, lo cierto es que puede entenderse como un preámbulo del Congreso Regional que se celebrará más adelante, en primavera, y donde sí se disputará el control del partido. Y el hecho de que Herrán haya rechazado la oferta de Zuloaga de consensuar una candidatura única para el Congreso Federal, se puede interpretar como toda una declaración de intenciones de cara a esa cita del próximo año.