El exconsejero de Cultura, Turismo y Deporte Javier López Marcano (PRC) ha quedado libre de causas judiciales al archivar el Juzgado de Instrucción número 3 de Santander la pieza de las subvenciones al Racing, en la que también estaban imputados los exdirectores generales de Deporte del Gobierno de Cantabria Fernando Castro, Ramón Cuesta y Javier Soler.
En un auto notificado este martes y dictado el pasado 18 de enero, el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Santander, Fernando Vegas, ha sobreseído esta causa, que investigaba las subvenciones por importe de dos millones de euros anuales que se habían otorgado al Racing entre 2006 y 2011, porque “de las diligencias practicadas no resultan indicios de delito”.
El sobreseimiento provisional y archivo de la causa no es firme y puede ser recurrido en reforma ante el propio órgano judicial en un plazo de tres días y en apelación ante la Audiencia Provincial en cinco días.
Esta causa sobre las subvenciones al Racing era la última que quedaba abierta contra el exconsejero y vicesecretario general de Política Institucional del PRC. Es una pieza separada del 'caso Racing', que se archivó en enero de 2017 después de costarle el escaño.
Tras las elecciones de 2015, renunció al acta de diputado del PRC para facilitar la investidura de Miguel Ángel Revilla como presidente de Cantabria, después de que Podemos pusiera como condición para abstenerse que PRC y PSOE dejaran fuera de las instituciones a sus “imputados por corrupción”.
El llamado caso Racing, en el que López Marcano estuvo imputado junto al exconsejero de Economía y expresidente del PSOE Ángel Agudo, nació de una querella presentada por la empresa pública Cantur bajo el mandato del PP, en la legislatura 2011-2015, tras haberse realizado una Comisión de Investigación en el Parlamento.
También fruto de una querella de Cantur impulsada por el PP, López Marcano fue juzgado por prevaricación en el caso de la 'Casa de los Gorilas' del Parque de la Naturaleza de Cabárceno, en el que fue absuelto.
En aquel caso, también se juzgaba al exdirector de Cantur Diego Higuera, quien precisamente esta semana se ha enfrentado a otro juicio, por presunta prevaricación administrativa por fraccionamiento de contratos a favor de Conurca, derivado de aquella época.
Auto
En el auto que exonera a Marcano, el magistrado instructor considera “acreditado documentalmente que las cantidades percibidas por Real Racing Club de Santander durante los ejercicios 2006, 2007, 2008 y 2009 estaban justificadas y se acomodaban a las condiciones del Convenio de 30 de enero de 2006 y el Decreto de Subvenciones 161/05, así como el cumplimiento de los sucesivos trámites administrativos”, señala Vegas.
Se refiere en este punto al propio pago por parte del Gobierno de Cantabria, a la presentación por el Racing de la relación de gastos subvencionables, a la certificación del director general de Deportes de tal justificación, a la justificación de estar al corriente de deudas, y al documento de pago firmado por el consejero de Deportes y la Intervención del Gobierno de Cantabria.
“Ello es así pese a que, tal y como indica el Ministerio Fiscal en su informe de 14 de enero de 2020, aun cuando los investigados no comprobaron materialmente si los justificados por el club estaban destinados a cumplir los fines del mencionado convenio”, señala.
Para entender que esas cantidades se acomodan al Convenio y al Decreto de Subvenciones, el magistrado se refiere a una interpretación del Tribunal de Cuentas, en autos de 2014 y 2015, y a un informe de la administración de 2019.
Y, con ello, concluye que “los gastos corrientes del club también eran subvencionables y no solo los de la promoción turística de Cantabria, puesto que el fin general de la subvención era el fortalecimiento financiero del club”.
Por otro lado, el auto también alude a las subvenciones del ejercicio 2011 que no llevaron el mismo trámite que las de ejercicios anteriores porque el documento de pago no vino precedido por el certificado de justificación de los fines del entonces director general.
Señala el magistrado en este punto que tal subvención “se acomodaba a iguales fines, y las certificaciones de Seguridad Social y Hacienda acreditan que Real Racing Club estaba al corriente del pago de sus obligaciones”.