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Las obras del rompeolas de Castro Urdiales provocan un gran vertido de fibras de plástico en el mar

Fibras de plástico en la playa de Brazomar en Castro Urdiales.

Rubén Alonso

Castro Urdiales —

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Las obras de la segunda fase del rompeolas de Castro Urdiales han protagonizado esta semana un episodio del que no ha sido ajeno ningún residente ni visitante del municipio. Y es que estos trabajos, que concluirán a mediados de agosto, han provocado un gran vertido de fibras de plástico que se ha extendido por todo el puerto, la bahía y las playas de la localidad oriental de Cantabria. El mar ha estado cubierto por una película de estas fibras cilíndricas de plástico, así como la orilla de los arenales de Brazomar y Ostende.

Los operarios han tratado de retirar el material contaminante con una grúa y redeños, pero la gran cantidad de fibras derramadas ha hecho imposible erradicar su totalidad. No obstante, la Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente dirigida por Roberto Media (PP), cuestionada por este periódico, ha asegurado que el vertido “se detectó de inmediato y se recogió todo lo que había caído al mar sin que hubiese ningún impacto”.

“Se limpió inmediatamente, por lo que no ha habido ninguna afectación; en unas horas se había limpiado todo”, han defendido desde este departamento, responsable de las obras del rompeolas, pese a que las virutas se han podido ver a lo largo de varios días en diferentes puntos del litoral de Castro Urdiales. La explicación que ha dado la Consejería al suceso apunta a que ha ocurrido tras hormigonar la parte del dique que queda sumergida en el agua.

Según fuentes de este departamento, como es una zona de difícil acceso, la actuación se lleva a cabo “por un sistema de mangueras que echa el producto para sellar esa zona con revestimiento de hormigón; se hizo con marea baja, ya que es el momento en el que se puede hacer, y luego la marea subió más de lo previsto y arrastró parte de las fibras que se habían echado”.

La segunda fase de refuerzo del rompeolas de Castro Urdiales ha contado con una inversión de más de cuatro millones de euros que se suman a los 2,6 que costó la primera. Según las previsiones del Ejecutivo autonómico, la obra, que consiste en ampliar y reforzar este dique de 500 metros de longitud, estará concluida en agosto, de manera que el día 14 podrá estar abierto al público.

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