El director del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (MUPAC), Roberto Ontañón, ha alabado la reacción “rápida” del actual Gobierno regional (PP) para dar una solución a los problemas surgidos al iniciarse los trabajos de ejecución de la nueva sede del museo, evitando su paralización, que hubiera sido “lo peor”.
“Creo que se ha respondido con agilidad y creo que es la mejor demostración del compromiso del nuevo equipo con este proyecto”, ha afirmado este jueves Ontañón, a preguntas sobre este asunto, en una rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, donde hoy y mañana dirige el curso 'El nuevo MUPAC: investigación, conservación e interpretación del patrimonio arqueológico en el siglo XXI'.
Ontañón se ha felicitado de que “parece que esta primera crisis” en las obras del nuevo MUPAC se haya “superado” tras el anuncio de hace una semana de la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, de aprobar, previsiblemente en septiembre, un modificado del proyecto para dar una solución a los problemas encontrados en la excavación, algo que, según se avanzó, encarecerían las obras unos 3,6 millones.
Ello permitirá incorporar un sistema nuevo de contención de tierras basado en la utilización de una hidrofresa, una técnica que se emplea en terrenos duros y sustratos rocosos como los que hay en la parcela donde se está levantando el MUPAC, lo que permitirá resolver los problemas de contención de tierras que dieron origen a la solicitud de Dragados de paralizar las obras temporalmente y --dijo Buruaga-- “permitirá acelerar la ejecución de las obras que acumulan un retraso no menor en estos momentos”.
Ontañón explicó que estos problemas surgieron “antes del cambio de Gobierno”, aunque en ese momento se estaba negociando qué hacer en el propio ámbito de ejecución de la obra hasta que luego “saltó a los medios de comunicación” y el Ejecutivo actual ha tenido que adoptar una solución.
“El Gobierno actual ha actuado con rapidez, ha entrado a estudiar el problema y a resolverlo”, ha dicho Ontañón, que además se ha felicitado de que, además, “parece” que la solución adoptada “no va a retrasarse” el plazo previsto de la ejecución de la obra, que según se dijo podría finalizar a finales de 2025 o 2026, amén de que en el futuro puedan ocurrir otros problemas que hagan que finalmente esto ocurra como sucede en muchas obras públicas.
Digitalización
Por otra parte, se ha referido al Plan de Digitalización del Patrimonio Prehistórico de Cantabria y Asturias, que recibirá fondos europeos, de unos 9 millones de euros, a través del programa 'RETECH' puesto en marcha por el Gobierno central.
Ha explicado que esas ayudas exigen cumplir unos plazos de ejecución que hacen que el proyecto tenga que estar “finalizado y justificado en el primer trimestre de 2026”, algo para lo que --ha reconocido-- “vamos muy justos”. Por ello, ha confiado en que, “atendiendo a la situación política de España”, que aún no tiene nuevo Gobierno, puedan “flexibilizarse”.
Ha reconocido que “hay mucho trabajo por hacer” y ha detallado que la previsión que había en relación a los pasos de este proyecto, en un situación “ideal”, era dedicar todo 2023 a la elaboración de los pliegos administrativos, a licitar y adjudicarlo para poder empezar a trabajar “en 2024”.
Dicho Plan va a permitir, por ejemplo, dotar de herramientas de realidad virtual a la exposición permanente, así como la digitalización de todas las cuevas con arte rupestre y paleolítico de la región.
Altamira
Por otra parte, Ontañón, miembro del Patronato de Altamira, ha sido cuestionado por la posibilidad de cambios en el régimen de visitas a la cueva --ahora solo se permite la entrada de cinco personas a la semana-- y ha señalado que por ahora “no hay ninguna previsión, de momento, de cambiarlo” porque “funciona bien”.
“Parece que lo soporta bien”, ha dicho Ontañón, que “se imagina” que el Patronato pueda reunirse “en breve” pues lleva sin hacerlo desde hace “más de 2 años”.