El Pleno del Parlamento de Cantabria ha sacado adelante este lunes varias iniciativas dirigidas al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, como la petición de una autorización para que la comunidad pueda captar 10 hectómetros cúbicos de agua del embalse del Ebro cada año de forma gratuita y permanente o la de sacar al lobo del Listado de Especies en Régimen de Especial Protección (Lespre) después de que Europa haya rebajado su estatus.
Ambas propuestas han recabado el consenso de la Cámara, ya que la primera se ha aprobado por unanimidad y la segunda con el voto de todos los grupos salvo el PSOE, que se ha abstenido argumentando que está de acuerdo “con el fondo”, que es la defensa de los ganaderos, pero no con “las formas” y con que “todo sea responsabilidad y culpa del Gobierno de España”.
Además, PP y Vox han unido sus votos en defensa de la energía nuclear y, frente a la total oposición de los otros dos grupos de la Cámara, PRC y PSOE, han logrado aprobar una proposición no de ley (PNL) en la que piden al Gobierno central reconocerla como una fuente de energía clave en la reducción de emisiones e “imprescindible dentro de nuestro mix energético”, así como cancelar el calendario de cierre de centrales nucleares.
Esta iniciativa partía de Vox pero ha salido adelante con una enmienda de modificación de los 'populares', que han defendido que el plan de cierre de nucleares del Gobierno “disparará la factura eléctrica” a empresas y consumidores, además de que “nos harán más dependientes del gas extranjero y multiplicarán las emisiones de gases contaminantes”.
Así, han acusado a los socialistas de “ecologismo sandía: verde por fuera, superficial, pero muy rojo por dentro”. Y han criticado su “hipocresía” porque, aunque en Cantabria no hay centrales nucleares, sí hay industria asociada que realiza trabajos auxiliares para éstas -como ENSA Equipos Nucleares, Special Materials Machining o Leading Metal Mechanic Solutions-, a la que el Gobierno regional ha ayudado económicamente desde hace varios años, también cuando gobernaba el bipartito PRC-PSOE.
En el lado opuesto se han posicionado PRC y PSOE, que han pedido dejarse de “discursos buenistas” y han advertido que la energía nuclear “no es limpia, ni barata ni sostenible”. Frente a ella, han incidido en que el futuro son las renovables.
“Déjense de discursos buenistas”, han pedido los regionalistas, denunciando que el PP ha “intentado dulcificar” el discurso de Vox pero en realidad han apoyado lo que para el partido se llama “renacimiento nuclear español”.
“Nucleares ni grandes ni pequeñas. Las energías renovables son la alternativa. Es más fácil, más seguro, más ambientalmente sostenible”, ha sentenciado el PRC, en el mismo sentido que el PSOE, que ha lamentado que PP y Vox estén “dispuestos a hipotecar a las generaciones venideras con desastres y contaminación”.
La iniciativa aprobada recoge cuatro puntos dirigidos al Gobierno de España, al que pide reconocer la energía nuclear como una fuente de energía clave en la reducción de emisiones, cancelar el calendario de cierre de centrales o reducir su carga fiscal; y otros cuatro enfocados al Gobierno de Cantabria, para que también apoye a estas empresas de cara a exportación, reduzca barreras comerciales, apoye la creación de proveedores locales y ofrezca soporte legal y consultoría especializada.
Ebro y lobo
Más acuerdo ha habido en la petición al Ministerio de Transición Ecológica de una autorización gratuita y permanente para cubrir las necesidades de abastecimiento de la comunidad autónoma y poder captar un mínimo anual de 10 hectómetros cúbicos, que ha salido adelante por unanimidad.
Todos los grupos han apoyado la moción presentada por el PRC en este sentido y han defendido que el Gobierno central garantice el suministro a Cantabria de forma definitiva dado que la concesión actual caduca el próximo mes de marzo, si bien el PSOE les ha tachado de “alarmistas” por insinuar que “nos podemos quedar sin agua” en la época estival. “¿Alguien piensa que eso es posible? ¿Cuándo nos hemos quedado sin agua en estos últimos cuatro años?”, ha cuestionado.
Y es que el PP ha señalado que “no podemos consentir que nuestra comunidad autónoma siga mendigando el agua como nos obliga en estos momentos el Gobierno de España”, cuando otras comunidades cuentan con la autorización que pide Cantabria. “No queremos ser más que nadie, pero tampoco menos”.
Al hilo, el PRC ha defendido su moción reconociendo que tiene que haber “solidaridad entre regiones”, pero “no puede ser que los cántabros asumamos sacrificios” como la pérdida de pueblos o el cambio de clima que supuso la construcción del embalse y “no seamos recompensados”, después de “casi 20 años dando vueltas a este asunto”.
Los portavoces han lamentado que Cantabria esté “supeditada” a las decisiones de otras comunidades cuando el agua que necesita cada verano es “insignificante”. En concreto, han dicho que en el año 2023 se consumieron 2,16 hectómetros cúbicos y en 2024 fueron 1,3, lo que supone un 0,4% y 0,24% de la capacidad total del embalse, respectivamente.
Respecto a la protección del lobo, los socialistas han subrayado que, a raíz de ese cambio, el Ministerio ha dicho que “si el criterio científico dice que hay que cambiar la protección, se hará”. No obstante, se han abstenido por “las formas”: “El cómo se utiliza la diana de Pedro Sánchez, el villano, para justificarlo todo”, cuando creen que el Gobierno regional también tiene “mucha responsabilidad”.
En este punto han coincidido con los regionalistas, que han lamentado que el Gobierno del PP “no ha hecho nada” en dos años en torno a este asunto, al igual que Vox ha dudado de si se ha trabajado toda la documentación que se debía remitir al Ministerio.