No ha habido sorpresas. PP y Vox han culminado este lunes la derogación de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Cantabria. El Parlamento autonómico ha acogido el polémico y definitivo debate en presencia de la plataforma memorialista constituida hace un año para combatir la supresión de esta norma, que fue aprobada durante la pasada legislatura por el bipartito PRC-PSOE y que ahora el Gobierno de María José Sáenz de Buruaga (PP) ha tumbado con el apoyo de la extrema derecha.
Así pues, la Plataforma Memoria y Democracia de Cantabria se ha concentrado en señal de protesta frente a la Cámara autonómica minutos antes de la celebración del debate político que se ha saldado con la prevista derogación de esta ley autonómica, pese al posible recurso ante el Tribunal Constitucional anunciado por parte del Estado.
“Asistimos al último acto de vergüenza de la derecha cántabra”, ha denunciado el coportavoz de la plataforma José Luis Pajares, criticando que sea esta la primera iniciativa legislativa que impulsa el Ejecutivo del PP en 16 meses de gobierno. “Debe ser que Cantabria no tiene otros problemas; es una indignidad dejar a una parte de la sociedad sin derechos, que además no son ni de derechas ni de izquierdas, son de todos”, ha lamentado, insistiendo en que los reclama la ONU. “Parece que a las derechas retrógradas que tenemos en Cantabria no les sirven”, ha criticado Pajares.
Y es que el PP ha defendido la revocación de la ley por “compromiso y por convicción”, ya que, a su juicio, no distingue “entre víctimas de primera y de segunda”, equiparando así, de nuevo, a las víctimas de la Guerra Civil y del franquismo con sus verdugos.
En similares términos se ha expresado la formación ultra de Vox, criticando que la norma “divida a las víctimas entre buenos y malos” estableciendo “una relectura de la Historia para reabrir heridas”, cuando el objetivo de las leyes de memoria, precisamente, es cerrar las heridas que siguen abiertas cuatro décadas después.
Y en esa línea han ido las intervenciones de las formaciones socialista y regionalista: “PP y Vox, por motivos espurios, quieren que las heridas permanezcan abiertas”, ha señalado el portavoz del PSOE, Pablo Zuloaga. “La ley que pretenden derogar recoge los principios de verdad, justicia, reparación y no repetición”, ha remarcado el portavoz del PRC, Pedro Hernando.
El debate político, que ha arrancado con un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas por la tragedia de la DANA que ha asolado especialmente a la Comunitat Valenciana, ha discurrido en términos similares al que tuvo lugar hace poco más de un mes durante la aprobación del primer trámite para tumbar la ley.
En este caso, el diputado popular Íñigo Fernández ha tildado de “amenazas intolerables” las declaraciones del ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, en su última visita a Santander, cuando anunció el posible recurso al Constitucional del texto alternativo a la Ley de Memoria impulsado por PP y Vox. “Hubiera estado más guapo si se hubiera quedado callado”, ha dicho.
Quitando esto último, y el contexto nacional de las consecuencias de la DANA -que también ha tenido espacio en el debate cuando el diputado del PP ha afirmado que Pedro Sánchez “echó a correr como una rata” durante su visita a Paiporta-, la sesión ha transcurrido como se esperaba: PP y Vox defendiendo que la Ley de Memoria Histórica es “sectaria” y “pone en peligro la convivencia”, mientras PRC y PSOE apelan a la necesidad y al carácter democrático de la misma, en base a los principios citados anteriormente de justicia y reparación.
“Día duro, y en blanco y negro”
“Hoy es un día muy duro”, ha subrayado el regionalista Hernando, lamentando que la derogación de la norma “se apoya en el sustento de la mentira intencionada”. “¿Adoctrinar es contar la verdad en las aulas? ¿Tenemos que obviar la verdad porque ustedes no son los buenos en la mayor parte del relato?”, le ha recriminado a los diputados de PP y Vox, tras afear al Ejecutivo de Buruaga que “lo único propio” de estos meses de mandato ha sido derogar. “Sin memoria no hay futuro”, ha sostenido el portavoz regionalista, “la memoria está viva y este Parlamento no puede derogarla”, ha resaltado, y, seguidamente ha rendido un homenaje a las víctimas recordando uno a uno sus nombres.
Por su parte, el socialista Zuloaga ha señalado que “hoy es un día en blanco y negro de la mano de PP y Vox”. “Alrededor de 7.000 familias cántabras no saben dónde tienen enterrados a sus muertos, y esas cifras tienen que recaer hoy en su conciencia”, ha resaltado, porque “derogar la memoria es instaurar el olvido”. “Derogar la Ley de Memoria Histórica y Democrática equivale a imponer el olvido de los crímenes del franquismo. Lo que queda después de esta derogación es su intento de imponer a una sociedad democrática el relato oficial de la dictadura para la eternidad”, ha lamentado el líder del PSOE, quien también ha advertido a PP y Vox que “por más que se empeñen en el olvido y en impulsar sus tesis revisionistas y negacionistas de lo que fue un golpe de Estado y una dictadura criminal, la verdad histórica siempre vencerá”. “Derogaréis, pero no convenceréis”, ha sentenciado.