El polémico proyecto para convertir Cantabria en 'la Ibiza del norte' ha dado el salto al plano judicial. La formación política Cantabristas, que promovió en mayo una masiva manifestación en Ribamontán al Mar, ha tomado la decisión de llevar a este Ayuntamiento a los tribunales para reclamarle por esta vía lo que por la administrativa les ha sido negado “en reiteradas ocasiones”, es decir, los expedientes relacionados con el proyecto urbanístico y las autorizaciones de construcción en vigor de este macrocomplejo turístico con 350 viviendas de lujo para segunda residencia, hotel y campo de golf junto a la playa.
Así lo ha anunciado este miércoles el secretario general de este partido, Paulu Lobete, quien ha denunciado “el interés deliberado en ocultar la información” por parte del citado Consistorio. “No nos queda más remedio que presentar una demanda y que sean los tribunales los que le obliguen a cumplir la ley”, ha subrayado.
Y es que, según ha detallado, su formación registró una solicitud de información pública el 23 de mayo para que el Ayuntamiento les facilitara los expedientes y las licencias de construcción que estaban en marcha en la zona afectada por el Plan de Ordenación del Litoral en el municipio de Ribamontán al Mar. El plazo se cumplió sin respuesta, por lo que Cantabristas interpuso el 18 de julio un recurso administrativo que también obtuvo el silencio por respuesta.
Así pues, ante esta situación, se han visto obligados a acudir a los tribunales: “La ley obliga al Ayuntamiento facilitarnos la información ambiental y de los expedientes que están en marcha, no solo a Cantabristas, sino al conjunto de la sociedad cántabra”, ha asegurado el líder de esta formación.
Y es que, según ha incidido Lobete, gran parte de la documentación solicitada se refiere a informes ambientales y licencias necesarias para llevar a cabo el macroproyecto turístico de 'la Ibiza del norte', cuyo rechazo social quedó patente en la masiva movilización que tuvo lugar entre Loredo y Langre hace seis meses bajo el lema 'Nuestra costa no se vende, Cantabria se defiende'.
Para Cantabristas, el continuo silencio que han recibido por parte del Consistorio “evidencia que o no está siguiendo los procedimientos legales o que trata de ocultar algo”. “Nosotros seguimos pensando que hay un proyecto detrás, sostenido parcialmente por el Plan de Ordenación Urbana que habilita y permite la construcción del campo de golf, de las viviendas asociadas y de un complejo hostelero, y eso es precisamente lo que no queremos”, ha remarcado Lobete, cuestionando que haya formaciones políticas que defiendan ese planeamiento urbanístico.
En este sentido, el secretario general de Cantabristas ha puesto sobre la mesa la contradicción que existe entre El Plan de Ordenación del Litoral y el Plan General de Ordenación Urbana. Según ha remarcado, el primero deja claro que no está permitido construir en muchos de los terrenos donde el segundo sí lo contempla. “Habrá que dirimir qué nomativa está por encima; nuestra posición es que se debe cumplir el Plan de Ordenación del Litoral porque es una ley superior a una ordenanza municipal”, ha expresado Lobete.
Así todo, según ha dicho, el paso inicial es conocer las autorizaciones y los expedientes para seguir dando pasos. Y es que, tal y como ha querido dejar claro, esta demanda probablemente no sea la última. “Iremos al fondo del asunto; cuando tengamos conocimiento de los documentos que solicitamos impugnaremos las licencias y todo el ordenamiento que implica que se esté legalizando algo que desde nuestro punto de vista no es legal”, ha resaltado. “Queremos dejar claro a quienes solo buscan especular y destruir nuestros entornos naturales para llenarse los bolsillos que Cantabria se defiende”, ha concluido el secretario general de la formación política Cantabristas.