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Sodercan cofinancia un proyecto de I+D de Textil Santanderina para reducir la huella de carbono

La Sociedad para el Desarrollo de Cantabria, Sodercan, ha aprobado en su convocatoria de ayudas para el fomento de la economía circular una investigación industrial de Textil Santanderina orientada a la implantación de nuevas técnicas de tintura, con el objetivo de continuar reduciendo su huella de carbono y posicionarse como una empresa más sostenible y competitiva desde el punto de vista de la eficiencia de recursos y la puesta en mercado de productos medioambientalmente responsables.

Bajo la denominación de 'MAGID', Textil Santanderina busca un nuevo proceso de tintura en un solo baño de color que integre la tintura de fibras mediante colorantes reactivos y pigmentos, bajo un enfoque de optimización en el uso de recursos, especialmente reducción de su huella hídrica, del consumo energético y de la generación de residuos, al mismo tiempo que se mantienen las propiedades y calidades en cuanto a color en una amplia gama de tonos respecto al proceso productivo tradicional, según informa Sodercan en un comunicado de prensa.

El objetivo de este proyecto de investigación industrial es identificar y evaluar las variables más importantes que intervienen en el nuevo enfoque y proceso productivo bajo un solo baño, favoreciendo un nuevo modelo basado en la economía circular. La investigación, en fase de desarrollo, cuenta con un presupuesto de más de 60.000 euros, de los que la sociedad pública dependiente de la Consejería de Industria, Empleo, Innovación y Comercio del Gobierno de Cantabria, cofinancia el 40%.

El proyecto permitirá a Textil Santanderina “minimizar” el impacto asociado al consumo de agua y energía, obteniendo al mismo tiempo “un potencial nuevo producto de valor añadido e interés para el mercado”. La empresa con sede en Cabezón de la Sal destaca por su trayectoria en el desarrollo de proyectos de I+D, impulsados por un departamento propio de I+D que trabaja en productos y procesos desde la conceptualización y primeras etapas de definición del proceso o producto hasta la realización de prototipos y pre-industrialización y cuenta con una infraestructura técnica y un equipo de profesionales “altamente cualificados” que le permite llevar a cabo ensayos químicos o mecánicos en la búsqueda de nuevos desarrollos.

Para Sodercan, los resultados de este proyecto ponen en una muy buena posición a la empresa en su filosofía de impulsar el crecimiento a través de una mejora continua de procesos y productos y la sitúan en la vanguardia en cuanto a acciones para reducir la huella de carbono, cuya medición y registro será obligatorio para las grandes empresas a partir de enero de 2025.

De hecho, Textil Santanderina es una de las entidades pioneras en la certificación y registro de su huella de carbono, que realizó por primera vez en 2022. Esta investigación se suma a otras impulsadas por Textil Santanderina, fruto de su compromiso ambiental, y apoyadas igualmente por Sodercan, para la puesta en marcha de procesos de captura y valorización de CO2 en sus instalaciones, entre otros objetivos.

Economía circular

El de Textil Santanderina es uno de los 13 proyectos de I+D aprobados por SODERCAN en su convocatoria de ayudas para el fomento de la economía circular de 2023, que suman una inversión de más de 800.000 euros. A la convocatoria de 2024, pendiente de resolver, se han presentado 16 proyectos con inversiones que totalizan 1,8 millones de euros.

El objetivo que persigue este programa de ayudas es reducir la generación de residuos a través de su reutilización, de la búsqueda de nuevas aplicaciones en la cadena productiva o la reducción en el consumo energético entre otras, todo ello enfocado a mejorar la eficiencia en el uso de los recursos y favorecer un modelo de crecimiento sostenible.

Son susceptibles de apoyo aquellos proyectos que contribuyan a la prevención o reducción de residuos, generen nuevas aplicaciones para materiales o residuos, favorezcan la eficiencia energética, prolonguen la vida útil de los materiales y/o productos, o desarrollen nuevas tecnologías o procesos encaminados a la valorización de residuos. Los proyectos deben enmarcarse en alguna de las líneas de actuación del Plan de Residuos de Cantabria.