La vacunación erradica la COVID de las residencias de mayores de Cantabria: “Volverán los besos y los abrazos”

Que la vacuna es la solución a la pandemia era sabido desde hace tiempo, antes de que comenzara el proceso. Pero es que sus resultados empiezan a ser claramente visibles entre el colectivo que, por ser especialmente vulnerable, ha sido el primero en recibir la inmunidad. Y es que la COVID-19 está desde el pasado viernes erradicada completamente de las residencias de mayores de Cantabria.

Ya no queda ningún contagiado entre los 6.200 usuarios y los dos últimos fallecimientos se produjeron hace más de un mes, concretamente el 24 de febrero. Pero es que además, desde hace dos meses, con la vacunación avanzada en estos centros, la caída de los casos activos comenzó a producirse en picado, pasando de los 130 o 140 de entre finales de enero y principios de febrero, al medio centenar de la segunda quincena del mismo mes, tal y como se puede observar en la gráfica de la página web del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS).

La excelente evolución no quedó ahí, puesto que desde el 25 de febrero, los infectados han estado por debajo de la decena, y durante todo el mes de marzo, la cifra no ha pasado de los tres casos, hasta el pasado viernes 26, cuando el último usuario fue dado de alta. Con ello se produce un punto de inflexión en la situación de estos centros, que desde que en marzo de 2020 estalló la crisis sanitaria han sufrido las consecuencias más dramáticas de un virus que se ha cebado con las personas mayores, llevándose por delante un total de 276 vidas entre los residentes de la comunidad.

Ahora, el Gobierno de Cantabria ha flexibilizado las medidas en los centros, ampliando los horarios de visitas y permitiendo contacto físico entre usuarios y familiares: “Volverán los besos y los abrazos”, ha asegurado el presidente de la Federación de Empresas de la Dependencia (FED) de Cantabria, Rubén Otero, en declaraciones a elDiario.es, dejando claro que las mascarillas y las medidas de seguridad seguirán presentes.

“La vacuna está haciendo su efecto de momento, pero no sabemos por cuánto tiempo”, ha reconocido, mostrando cautela sobre las medidas que se relajan desde este lunes, tal y como recoge un Boletín Oficial Extraordinario (BOC) de la Consejería de Políticas Sociales que dirige Ana Belén Álvarez (PSOE).

Así todo, Otero ha celebrado que desde ahora los residentes podrán compartir más tiempo con sus familiares, porque cabe recordar que en Cantabria, desde que se levantó el primer estado de alarma, las visitas han estado permitidas. En este sentido, ha subrayado que se sorprendió cuando hace pocos días conoció la noticia de que en Castilla-La Mancha se volvían a permitir las visitas después de un año.

“Los tres meses que estuvimos nosotros ya me pareció mucho, pero es que un año creo que es tremendamente doloroso para los familiares”, ha lamentado, poniendo en valor el grupo de trabajo creado por el ICASS, entre las Consejerías de Políticas Sociales y de Sanidad junto con las residencias, que elaboró el plan de contingencia que ha permitido que se sigan realizando visitas en Cantabria desde el pasado junio con todas las medidas de seguridad.

La vacunación en estos centros alcanza niveles muy elevados. En concreto, el 94,2% de los residentes están vacunados, de los cuales el 91,4% está inmunizado. “Un éxito”, según el propio Ejecutivo autonómico. Respecto al proceso general, actualmente el 11,1% de la población cántabra ha recibido una dosis y el 7,5% cuenta con la pauta completa.