El Hospital Valdecilla sigue reajustando sus servicios ante la mayor presión de los pacientes por COVID que le llegan, algo que es más significativo en las salas de cuidados intensivos. Siguiendo lo dispuesto en el Plan de Contigencia, la dirección del hospital ha asignado la sala B de UCI también a pacientes COVID por lo que tiene ahora tres salas UCI exclusivamente dedicadas a tratar los efectos más graves de la pandemia.
A aquellos pacientes de intensivos que no están afectados por el virus SARS-CoV-2 se los está ubicado en las salas de intensivos de Cardiología y Reanimación y a los que ingresan en esta se los aloja en el Hospital de Día.
Treinta y cuatro personas están siendo atendidas en las UCI de los hospitales cántabros, en su mayoría en Valdecilla. Rafael Tejido, director del hospital, ha dado cuenta este martes de cómo se está readaptando Valdecilla para las dos semanas que se avecinan, en las que se espera que se mantenga la alta presión hospitalaria que produce la enfermedad. Una de lAs consecuencias será la reducción de la actividad no-COVID.
“Planificamos en función de la tasa de incidencia de la Comunidad, en función del número de ingresos, de la hospitalización convencional e intensiva, de la presión que hay en urgencias y de nuestros índices de ocupación. Tenemos muy claro que en estas dos semanas va a haber mucha presión en el hospital y, en este sentido, vamos a tener que reajustar y disminuir la actividad en el hospital no-Covid”, ha dicho.
Reordenación
Ahora mismo, pertenecen al dispositivo UCI-COVID los siguientes espacios: Pabellón 15 e UCI A, B y C. En hospitalización, se mantienen, de momento, las siguientes plantas COVID: las tres plantas 7ª de las Tres Torres y las 7ª y 8ª del edificio 2 de Noviembre; en total, cinco plantas.
Tenemos muy claro que en estas dos semanas va a haber mucha presión en el hospital y, en este sentido, vamos a tener que reajustar y disminuir la actividad en el hospital no-Covid
Lo que ha hecho Valdecilla ahora es convertir la sala B de la UCI convencional en una UCI COVID, que aporta al dispositivo 12 camas. A los pacientes no COVID que hasta este lunes estaban ingresados en esa sala se les ha trasladado a la sala de intensivos de Cardiología y a la REA (Reanimación), de este modo, al no estar infectados por el virus, pueden convivir con los pacientes postquirúrgicos.
“Hemos reorganizado los espacios para que los pacientes en intensivos-COVID estén en las salas A, B y C y Pabellón 15; y hemos utilizado para los pacientes críticos no-COVID espacios de Cardiología y la zona de reanimación desplazando algunas de las actividades de esta al Hospital de Día Quirúrgico”, ha detallado Tejido.
El hospital, en este sentido, está siguiendo lo que estipula el Plan de Contingencia para crisis asistenciales, como el mismo director explica:
“El impacto en el hospital como consecuencia del aumento de la tasa de incidencia en la Comunidad ha provocado que tengamos más ingresos en las unidades de hospitalización convencional y más en las unidades de cuidados intensivos y en este sentido en el Plan de Contingencia planificado hemos abierto un nuevo área COVID (por la UCI B) con capacidad para 12 pacientes más”.