Los vecinos de Selaya consideran que la envergadura de la propuesta de la Consejería de Obras Públicas para arreglar la carretera de Pisueña es “excesiva e innecesaria”, ya que implica “decenas de expropiaciones”.
El colectivo vecinal celebra que se vaya a acometer el arreglo tras “dos décadas de espera”, pero pide que se haga “con cabeza” y con un enfoque “más participativo y transparente”, según ha trasladado en un comunicado la Asociación La Velorta.
Y es que los vecinos de Selaya se están organizando con ayuda de esta asociación y con asesoría jurídica para pedir que se reevalúe el proyecto que consideran “decepcionante” y se consideren alternativas que sean “menos intrusivas y más respetuosas con el entorno”.
Como señalan, éste implicaría la expropiación de parcelas en las que se hallan paredes de piedra de interés cultural protegidas por la Ley de Patrimonio Cultural de Cantabria, árboles antiguos “de gran importancia ecológica y cultural” y musgos de interés ecológico también protegidos por la Ley de Conservación de la Naturaleza.
A su juicio, es “esencial” la participación de los residentes para “garantizar que cualquier proyecto de carretera refleje verdaderamente las necesidades y deseos de la comunidad local”. “La modernización no debe ocurrir a expensas de la historia y la naturaleza que hacen de Selaya un lugar único”, sentencian los vecinos.