UPA ha subrayado que la campaña de aceite de oliva se ha cerrado con un “récord absoluto” en comercialización que se ha situado en 1.631.733 toneladas, al tiempo que se ha confirmado un enlace de campaña de 491.223 toneladas, un 30 por ciento menos que el enlace de hace 12 meses, lo que esperan pueda redundar en una mejora de los precios.
Así lo ha indicado el secretario general de la organización agraria en Andalucía, Miguel Cobos, que ha realizado el último análisis de cierre del mercado de aceite de oliva coincidiendo con el final de la campaña.
La organización agraria ha indicado que el aceite producido hasta este último mes de septiembre de campaña, ha alcanzado un acumulado en España de 1.125.356 toneladas. El total de salidas entre las exportaciones y el mercado interior aparente de septiembre se ha situado en “la extraordinaria” cifra un mes más de 147.233 toneladas, teniendo en cuenta unas importaciones estimadas de 15.000 toneladas, importaciones que, desde el punto de vista de UPA, “deberían de empezar a remitir de cara a la campaña próxima”.
Atendiendo a los datos de entradas y salidas de aceite de oliva, las existencias totales a 30 de septiembre se sitúan en las 491.223 toneladas repartidas entre 223.979 toneladas en almazaras, 234.906 toneladas en envasadoras y refinerías, y 32.338 toneladas en el Patrimonio Comunal Olivarero. “Estamos, por tanto, ante una campaña de comercialización récord y hay razones más que de sobra para que la próxima campaña, con los aceites nuevos que ya han empezado a recolectarse, lo haga con una clara y notoria mejoría de precios a percibir por los agricultores”, ha dicho Cobos.
En este sentido, ha indicado que ya se atisba en las primeras operaciones esta mejoría, pero ha incidido en que es algo que debe de perdurar durante toda la campaña. Para Cobos, de cara a la presente campaña de recolección que comenzó el pasado 1 de octubre es necesario un cambio de modelo que pase, entre otras cuestiones, por el cumplimiento “estricto” de la nueva Ley de la Cadena Alimentaria para que los agricultores no pueden cobrar precios por kilo por debajo de sus costes de producción.
Ha subrayado que las previsiones de producción apuntan a una campaña mundial “equilibrada, incluso algo corta por la demanda creciente, que nos hará partir con menos excedentes en la siguiente 21/22”.