El serotipo tres de la lengua azul de ovino, el más temido por los ganaderos, ha llegado a Castilla-La Mancha, concretamente en un foco que se ha detectado en la comarca de Oropesa. Así lo ha confirmado hoy el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán durante su participación en una jornada sobre seguros agrarios en Villarrobledo (Albacete).
“Esta misma mañana se confirma la presencia del serotipo tres en la comarca de Oropesa. Es una evidencia que veníamos anunciando que llegaría en un momento u otro por la peculiaridad que tiene el vector, ya que es un mosquito que vuela, pero que también lo traslada el viento incluso a grandes distancias”, ha señalado y ha recordado que en Castilla-La Mancha es estos momentos ya hay constancia de que hay presencia de los serotipos uno, tres, cuatro y ocho.
El consejero ha recordado que el serotipo tres es el que más incidencia dañina puede tener en las explotaciones por sus tasas de mortalidad. Por ello, desde la Consejería se está trabajando “muy intensamente, diariamente con el Ministerio de Agricultura y ya se tiene el compromiso, tras la petición que hemos realizado, de abastecernos de vacunas del serotipo tres que es el que más dificultad había para conseguir, porque era al menos frecuente y el que más necesidad tenemos de facilitar los ganaderos para intentar paralizar la dispersión de la de la enfermedad”.
Sobre las vacunas de los distintos serotipos, el consejero ha señalado “se está trabajando en intentar unificar los diferentes serotipos en la misma vacuna por parte de los laboratorios”.
Además, la administración regional ha abierto un canal de petición de ayudas para ayudar con casi al 90 % del coste de la vacuna a través de las Asociaciones de Defensa Sanitaria Ganadera.
Martínez Lizán también ha recordado que la aparición de este nuevo serotipo va a suponer un endurecimiento de las restricciones para el movimiento de ganado con el fin de evitar la dispersión de la enfermedad y evitar que llegue al resto.
ASAJA pide flexibilización
Esta misma mañana ASAJA Castilla-La Mancha ha solicitado a las autoridades competentes la mayor flexibilidad posible en la regulación de los movimientos de ganado, dada la reciente extensión de nuevos serotipos de la lengua azul en la Península Ibérica.
La responsable de ganadería de ASAJA Castilla-La Mancha, María Tapia, ha explicado que la organización agraria está en contacto permanente con la Consejería y el Ministerio para que las medidas de control sanitario que se vayan implementando afecten lo menos posible a la actividad de los ganaderos y a su viabilidad económica.
“Estamos vigilantes ante los cambios constantes de la evolución de esta enfermedad que no afecta al ser humano, pero sí al ganado ovino, caprino y vacuno. Nuestro compromiso es trabajar junto a las administraciones para garantizar la seguridad sanitaria de la cabaña ganadera sin que ello signifique un freno a la actividad ni un nuevo varapalo económico para los ganaderos, más teniendo en cuenta que este virus se transmite a través de un vector, un mosquito, y dependiendo de las corrientes de aire”, ha señalado Tapia.
La organización ha remarcado la importancia de evitar restricciones excesivas de cara a la comercialización y exportación de los animales, ya que puedan generar grandes pérdidas económicas para los ganaderos en un momento ya de por sí complicado para el sector. No obstante, la responsable ha pedido a los ganaderos “que sigan las recomendaciones oficiales, apliquen los repelentes y tratamientos desinsectantes apropiados y extremen las precauciones hasta que llegue el periodo estacional libre de vectores”. Este periodo ha indicado, está fijado para el 1 de diciembre en las provincias de Albacete, Cuenca y Guadalajara y el 15 de diciembre para Ciudad Real y Toledo. “La situación es complicada pero transitoria, porque tenemos cerquísima el periodo de estacionalidad libre en el que ya no habrá restricciones para los movimientos”.
Además, la responsable de ganadería ha manifestado que “estamos muy pendientes de las conversaciones entre el Ministerio de Agricultura y las autoridades marroquíes para ver cómo quedan finalmente las exigencias de los movimientos en la exportación ante la falta de vacuna y confiamos en que pronto tendremos buenas noticias para nuestros ganaderos”.
También ha valorado el trabajo que están realizando cinco comunidades autónomas (Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Madrid y Andalucía) para llegar a acuerdos de mesa, una opción que ha permitido el Ministerio de Agricultura para agilizar los movimientos entre dichas regiones.
Igualmente, con el objetivo de facilitar la actividad ganadera, ASAJA Castilla-La Mancha ha solicitado también a las autoridades que aúnen esfuerzos para lograr vacunas combinadas que incluyan los diferentes serotipos del virus. La organización ha resaltado que “esta opción reduciría las complejidades logísticas y el tiempo que los ganaderos deben dedicar al confinamiento y manejo del ganado durante el proceso de vacunación, simplificando la tarea y disminuyendo el estrés tanto para los animales como para los productores”.