La Ley de la Viña y el Vino de Castilla-La Mancha se aprobará, tras su debate, en las Cortes de Castilla-La Mancha el próximo el 28 de julio. Así lo ha manifestado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, quien esta mañana ha participado en el desayuno informativo organizado por La Tribuna de Albacete en colaboración con Agro-Santander, ante cerca de 200 personas, representantes del tejido económico y social.
En declaraciones a los medios de comunicación, se ha referido a que, de esta manera, se recupera una ley “que nunca debimos perder”. En este sentido, ha añadido que “siendo Castilla-La Mancha la bodega del mundo, necesitábamos tener una ley a la altura de lo que representa Castilla-La Mancha en ese sector, en el que somos líderes mundiales” y ha recalcado que va a ser una “excelente noticia que da seguridad al sector, que incorpora nuevos modelos de negocio y garantiza la trazabilidad de nuestro vino para venderse aquí y en todos rincones del mundo”.
Ha recordado también que esta normativa proviene del Plan Estratégico trabajado con el sector en la legislatura pasada y en el que se marca la fecha de 2025 para alcanzar los 2.500 millones de euros en valor en la exportación. Un sector, muy importante para la región, ha señalado, desde el punto de vista “económico, social y territorial”.
En datos, ha trasladado, durante su intervención en el desayuno, las existencias a 31 mayo de vino y mosto en Castilla-La Mancha, con 15,5 millones de hectolitros y con una reducción de dos millones respecto al mes anterior, augurándose “menos existencias a 31 de julio, siendo un dato positivo”.
Así, ha pedido a los presentes que “tenemos que hacer el esfuerzo de contarlo en positivo. No trasladar un mensaje de tristeza permanente porque el sector no es eso, no representa lo mejor de nuestra tierra”.
Además, otros aspectos abordados en la jornada de hoy por Martínez Arroyo han sido la nueva PAC, como la llegada de más fondos para la región que va a ser de las más beneficiadas, por lo que ha lanzado un mensaje claro sobre las regiones agronómicas, que pasarán de 50 en la actual PAC a 20 a partir de 2023, “no es lo que quería la región, que desde el principio ya había puesto sobre la mesa una reducción aún mayor de estas regiones de convergencia”, ha reiterado.
Por su parte, el consejero ha calificado de “importante” el hecho de que se haya conseguido mantener a los agricultores medianos y pequeños. “Cuando nos contaron una moto en la negociación pasada de que íbamos a expulsar a la agricultura de sofá. Eso no sucedió y se expulsó a los más pequeños”, ha recalcado.
En relación a la situación actual, Martínez Arroyo ha reiterado la petición realizada desde España y apoyada por Castila-La Mancha para que la Comisión Europea autorice la siembra de los barbechos para los cereales de invierno, algo que se espera autorice la Comisión Europea el próximo lunes, que beneficiaría a una región como la nuestra con 600.000 hectáreas en barbecho que podrían sembrarse.