El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo ha apelado hoy “al sentido común, a la colaboración, a la solidaridad, a la cooperación entre las bodegas y los viticultores de la Denominaciones de Origen (DO) Valdepeñas” para atajar la situación de la misma. al ser preguntado por los medios de comunicación sobre la reciente dimisión del presidente de este Consejo Regulador apenas un mes después de ser elegido para el cargo.
El consejero ha sido contundente al remarcar que “el compromiso último del Gobierno regional en esta DO y en general en todas está con aquellos a partir de los cuales se inicia la cadena vitivinícola, en este caso, los viticultores”. Y ha señalado que el objetivo de la Consejería “es que la viticultura en Valdepeñas siga siendo rentable y permita mantener las explotaciones de aquellos que hacen posible que en el mundo se venda vino de Valdepeñas”.
El consejero se ha mostrado convencido que “en muy poco tiempo el Consejo Regulador va a tener un nuevo presidente que impulse los trabajos que se iniciaron en el año 2016 ”y que culminaron con la elaboración de un decálogo que estará plenamente en vigor en aproximadamente en año y medio.
Martínez Arroyo ha agradecido a Antonio Torres, el presidente saliente, su compromiso con la Denominación porque “estuvo dispuesto a asumir esta responsabilidad muy complicada en una denominación Valdepeñas siempre difícil porque ha habido muchos intereses comerciales entre las grandes empresas presentes en las mesas en las que se toman las decisiones y esto dificultan los avances”, ha señalado.