Una veintena de cooperativas muestran su rechazo a la minería de tierras raras: “Generará despoblación a largo plazo”

Una veintena de cooperativas agroalimentarias ha mostrado en conjunto su rechazo a la minería de tierras raras en la provincia Ciudad Real y han advertido de que no es “un germen de riqueza”, sino que “generará despoblación” a largo plazo. En este sentido, han pedido apoyo a su sector, que está “consolidado” y “ampliamente reconocido” a nivel nacional e internacional.

Las cooperativas han pedido a la Junta de Comunidades que muestre un rechazo “contundente” a la propuesta de la mercantil Quantum Minería, “teniendo en cuenta el desfavorable coste-beneficio que entraña y sus múltiples riesgos de cara al futuro”.

En concreto, con relación al sector de las cooperativas, han recordado su “relevancia social y económica” en la región, según el último informe elaborado por Cooperativas Agro-alimentarias, en el que se señala que más del 10% de la población mayor de edad de Castilla-La Mancha está asociada a alguna de sus entidades y el 45% vive en el medio rural.

Piden el apoyo institucional a sus actividades

Ante estas cifras, resaltan que es necesario “brindar toda la protección y el apoyo institucional pertinente a sus actividades”. “De hecho, el 14% de la base social de cooperativas españolas es socia de una cooperativa en territorio castellanomanchego y el 32% de las familias de la autonomía percibe rentas de alguna de ellas”, añadieron.

En el caso concreto de la provincia de Ciudad Real, añaden, hay 101 cooperativas que ofertan productos de “referencia”, como el aceite de oliva o el vino a nivel regional, pero también otros como los cereales, la producción hortofrutícola y los productos ganaderos.

“Más allá de la economía local, fomentan la expansión y comercialización a nivel nacional e internacional de la producción de calidad castellanomanchega”, explican. Y es en este contexto, que una actividad como la minería de tierras raras “no tiene sentido”, según alegan los representantes de las cooperativas.

Por otro lado, han advertido de que el proyecto 'Neodimio' es “tan solo un conato incipiente” de los planes de Quantum Minería para “buena parte” de la provincia de Ciudad Real, y han recordado que “expertos del ámbito científico” han alertado de que la actividad “es incompatible con la protección del medioambiente y la biodiversidad que sustenta la actividad agropecuaria”.

Defienden que el suelo es un “ser vivo”

“El suelo no puede ser considerado como un elemento inerte de 'quita y pon' sino que se trata de un ser vivo, pues tanto su biodiversidad microscópica como los distintos elementos de la cadena trófica integrados en el mismo son responsables de numerosos procesos ecológicos que son claves en la producción agrícola”, recalcan los representantes de las cooperativas.

También defienden que los suelos agrícolas “desempeñan un papel fundamental” en la sostenibilidad del medio ambiente, y, por tanto, también en la producción agroalimentaria. “Es crucial protegerlos de actividades que puedan poner en riesgo su fertilidad y productividad”, resaltan.

Las cooperativas también han recordado las “intenciones declaradas” de la empresa Quantum Mintería, que “incluso ha llegado a afirmar que pretende tratar mineral de otros países en la provincia, mineral que en el caso de las tierras raras cuenta con la presencia de trazas de elementos radioactivos como el torio y el uranio”.

“Sencillamente, convertir la provincia de Ciudad Real en una suerte de vertedero de residuos contaminantes para el beneficio de unos pocos no es solución ni futuro ni es compatible en modo alguno con una actividad como la nuestra que dinamiza socialmente, genera empleo y otorga un merecido prestigio a nuestra región”, han zanjado.

Por último, han resaltado que desde 2017 tanto la Junta de Comunidades como los tribunales de Justicia han rechazado los proyectos de la empresa al determinar que son “incompatibles e inviables desde el punto de vista medioambiental” respaldados por informes de “múltiples” entidades de referencia como la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) o la Fundación Internacional para la Restauración de los Ecosistemas (FIRE).

“En contraste, la actividad de las cooperativas agroalimentarias tanto en Ciudad Real como en Castilla-La Mancha es un elemento vertebrador a nivel económico y social que resulta esencial para enfrentar el desafío demográfico y garantizar la sostenibilidad del medio rural al fijar población, aportar un impagable valor añadido al territorio y garantizar futuro y estabilidad a las familias. No estropeemos un sistema productivo de garantía a cambio de promesas inciertas establecidas para el beneficio de especuladores”, concluyen.