El Ayuntamiento de Alcázar de San Juan ha comunicado que no continuará con el recurso de apelación que presentó la anterior corporación ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha en contra de la sentencia que declaraba nulo el Pleno en el que se aprobó el cambio de modelo de gestión de la empresa municipal Aguas de Alcázar.
Gonzalo Redondo, teniente de alcalde del Consistorio, ha señalado que el equipo de Gobierno considera que la sentencia que declaró nulo este proceso está “perfectamente argumentada”. La decisión del Gobierno municipal no es ninguna sorpresa, ya que fue precisamente Rosa Melchor, entonces concejala de la oposición y actual alcaldesa de la localidad, la que planteó presentar un recurso contencioso administrativo, por vulneración de derechos fundamentales en el pleno celebrado el 14 de octubre de 2013.
Fue en este Pleno cuando el entonces alcalde de la localidad, el ‘popular’ Diego Ortega, aprobó el cambio del modelo de gestión del servicio de abastecimiento, saneamiento y depuración del ciclo integral del agua, con lo que se inició la venta de acciones al socio privado Aqualia, que ostenta actualmente más del 52% de la empresa municipal.
El Ayuntamiento de la localidad ha señalado que no se seguirá adelante en este recurso, por “responsabilidad” y también para ahorrar gastos al consistorio, ya que los técnicos municipales han señalado que el recurso “no tiene posibilidad de prosperar”. Rosa Melchor no participó en la votación que tomó esta decisión, y serán los Juzgados los que deban finiquitar el proceso.
Las 'irregularidades' que anularon el Pleno
El pleno extraordinario del 10 de octubre, en el que comenzó el proceso de cambio de gestión de la empresa municipal de aguas de la localidad, fue anulado por el Tribunal de Recursos Contractuales del Ministerio de Hacienda debido a “irregularidades del contrato”, tal como señaló el dictamen que hizo público el PSOE. La decisión del Tribunal fue consecuencia de una serie de recursos que interpuso el grupo municipal socialista como oposición en el anterior Gobierno municipal de Alcázar de San Juan.
El Ayuntamiento justificaba entonces el cambio de modalidad de la empresa por la deuda de la empresa municipal, que cifraban en unos ocho millones de euros. Este argumento fue rechazado de forma contundente por el grupo socialista, quienes negaban la deuda y señalaban que, de existir, la deuda es al Ayuntamiento por lo que “no existía” problema. Rosa Melchor acusó entonces al equipo de Gobierno de “regalar” las aguas de Alcázar a la empresa privada.