Los trabajadores sociales de Castilla-La Mancha han puesto sobre la mesa la necesidad de contratar a más personal en las distintas áreas de servicios sociales de la región. Así lo esñalaron en la Jornada de Evaluación de la Estrategia de Lucha contra la pobreza y la Desigualdad Social que tuvo lugar el pasado 10 de mayo en Albacete y cuyas conclusiones acaban de ser publicadas por la Red Europea de Lucha contra Pobreza y Exclusión Social de Castilla-La Mancha (EAPN-CLM).
El acto, al que asistió la Consejera de Bienestar Social Aurelia Sánchez y la Directora Provincial de Bienestar Social Antonia Coloma, se puso en marcha con la presentación del El Pilar de Derechos Sociales y la Estrategia Nacional contra la Pobreza, a cargo de Ángel Parreño, Director General de Servicios para las Familias y la Infancia del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, que contextualizó el importante papel que juega la Estrategia contra la Pobreza de Castilla-La Mancha en el plano nacional.
Posteriormente, se estableció un espacio de debate y propuestas donde los profesionales de servicios sociales y de entidades tuvieron la oportunidad de trabajar conjuntamente en avanzar con la evaluación y propuestas de mejora de la estrategia para los próximos años.
Entre las propuestas realizadas por los participantes, destacan la importancia de “blindar” los derechos sociales y la propia Estrategia con el fin de que no estén subordinadas al devenir político; la necesidad de reforzar los recursos humanos en Servicios Sociales, puesto que son insuficientes en relación con la cantidad y complejidad de las situaciones personales que deben tratarse; una mayor coordinación entre el sector público y privado (ONG), y la importancia de trabajar a la vez en cuestiones paliativas y preventivas.
Como ejemplo de esto último, se citan los itinerarios, que no deben acabar en formación, sino en empleo. Los profesionales señalan que “muchas de las ideas” fueron “coincidentes” entre los distintos grupos que participaron en la jornada, de modo que consideran “reforzadas” la consistencia y coherencia de las propuestas y observaciones.