- Desde su puesta en marcha, se ha atendido a más de 68.000 personas, de las cuales el 46% han sido menores de edad
El Plan contra la Pobreza Energética ha llegado a más de 14.000 beneficiarios en el primer semestre de 2018, de los que 6.501 han sido menores, un 45,87%. Se ha tramitado un total de 4.073 ayudas económicas, de las que 1.430 han ido dirigidas a familias de la provincia de Albacete, 874 de Ciudad Real, 527 de Cuenca, 447 de Guadalajara y 795 de Toledo. De estas 4.073 unidades familiares beneficiarias de la ayuda durante 2018, más de la mitad lo fueron también en el año 2017, mientras que un total de 96 hogares han recibido dos ayudas hasta junio de 2018.
Por otro lado, se ha intervenido en 261 hogares para paralizar cortes de suministros energéticos y en otros 29 para realizar reposiciones, de modo que 290 hogares se han beneficiado de los convenios con las compañías suministradoras. Desde la puesta en marcha de la iniciativa, en la que colabora también Cruz Roja, se ha concedido 18.415 ayudas económicas; mientras que se han realizado 1.224 paralizaciones y reposiciones, de modo que el total de beneficiarios asciende a 68.046.
El Plan contra la Pobreza Energética forma parte de la Estrategia contra la Pobreza y Desigualdad Social de Castilla-La Mancha. Dicha estrategia se divide en tres ejes: medidas paliativas, medidas preventivas y medidas encaminadas a la sostenibilidad del sistema social. El primer eje engloba las medidas paliativas, de ‘choque’, entre ellas, la mejora del Ingreso Mínimo de Solidaridad (IMS), la puesta en marcha de planes de empleo específicos, el incremento de las becas de comedores y la continuidad del Plan contra la Pobreza Energética.