Emotivo día en las Cortes de Castilla-La Mancha, donde se ha aprobado por unanimidad la Ley de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI de la región, una normativa calificada como “histórica” y que deja sólo a Asturias y Castilla y León como las únicas comunidades sin legislación propia destinada al colectivo. Es una “creencia profunda en la justicia”, aseveró Blanca Fernández, consejera de Igualdad, que ha presentado el texto en nombre del Consejo de Gobierno, agradeciendo por nombre y apellido a muchas personas activistas que copaban las tribunas y las salas de comisiones como testigos del momento que vivido la cámara.
Fernández ha recalcado que la Ley ofrece una oportunidad para dar “ejemplo” en un momento en que la política está “tan denostada”. “Nos iría mejor si fuéramos más capaces de llegar a acuerdos y consensos”, recalcó, apuntando que se aceptó la mayoría de las enmiendas enviadas al texto, que fueron centenares de decenas de organizaciones y personas particulares. “Hemos incorporado en la medida de lo posible todas las sensibilidades, y hemos aceptado las alegaciones con independencia de quien fuera el aturo”, resaltó la consejera de Igualdad.
Emoción en sus palabras al recordar a las “madres coraje” que estaban presentes en el pleno, Patricia, Paloma y Anabel. Y es que la ley tiene un apartado e protección de la juventud, al igual que también de las personas mayores y de quienes estén en situación de vulnerabilidad. “Si la ley está hecha contra los estereotipos, contra el miedo y el sectarismo, teníamos que construirla con la buena fe de quien quería aportar para construir”, recalcó. “Por qué es necesario hacer una ley específica para proteger los derechos y libertades de las personas LGTBI en Castilla-La Mancha? ¿No es suficiente con la Constitución? No, no lo es”, afirmó Fernández.
Este texto, explicó, servirá para atender, por ejemplo, a quien sufra secuelas tras un ataque violento. “¿Qué persona LGTBI haciendo el análisis, no ha dicho cómo mínimo una vez que ha sufrido acoso, mobbing o violencia en el peor de los casos? Sabemos que esto es así. No podemos dar la espalda”, resaltó Fernández, quien agradeció el trabajo de más de dos años de todo el equipo de la consejería. “Esta ley desarrolla un mandato constitucional que protege derechos fundamentales. Las personas LGTBi de Castilla-La Mancha no son menos”, concluyó.
El PSOE afirmó que la ley está “muy consensuada” con las asociaciones LGTBI y su portavoz, Charo Saco, recordó que prácticamente la mitad de las parejas del colectivo señalan que no se atreven a darse la mano. También recordó a personalidades históricas del colectivo, como Javier Fernández Arroyo, fundador de la asociación Bolo-Bolo, Gustavito, enfermero y matrón de Albacete que resultó ser una “institución” para el colectivo en los años 40 y 50, así como Ana Pérez, la “primera actriz” de una película de temática trans, originaria de Hellín. Saco resaltó también que la extrema derecha “amenaza” a la región, y que Vox ya ha anunciado que hará lo posible por recurrir la ley. “Nos causa tristeza y enfado”.
La diputada de Ciudadanos, Elena Jaime, también recordó a Sonia Rescalvo, mujer trans originaria de Cuenca que fue asesinada en Barcelona y cuyo asesinato se reconoce como el primer crimen contra una persona trans de España. “Hoy nos sirve para recordar lo que nos ha traído aquí, los pequeños y grandes avances, y los estigmas a los que se ha visto abocado el colectivo”, resaltó, rememorando también a la poeta Soco Cordente, también conquense que falleció recientemente.
La diputada del PP Gema Guerrero, ha recordado que el PP “siempre ha trabajado” en la protección de estos derechos. “La nuestra no es una libertad impuesta, es una igualdad liberal, la que pretende las mismas oportunidades para todos, los mismos deberes, las mismas obligaciones”, ha afirmado parafraseando a Mariano Rajoy.