Castilla-La Mancha mantendrá a 744 sanitarios contratados durante el verano y reforzará con 90 personas la atención telefónica

Castilla-La Mancha iniciará el próximo viernes, día 11 de septiembre, la segunda fase de actuaciones en Atención Primaria con motivo de la COVID-19 y después de que haya sido informado el Consejo de Gobierno. En este nuevo proceso, la Consejería de Sanidad va a mantener a los 247 médicos y 497 enfermeras contratados durante el verano, un total de 744 sanitarios sin contar a los rastreadores del virus. Además, también reforzará la atención telefónica con la contratación de 90 personas de refuerzo para que las llamadas de petición de consulta y de cita “siempre tengan respuesta”.

Así lo ha detallado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, quien ha dado cuenta del desarrollo de la primera fase en Atención Primaria desde el pasado mes de marzo: hasta agosto se ha contratado a 6.750 profesionales sanitarios, un 25% de los mismos para Atención Primaria, a los que se añaden las 427 enfermeras rastreadoras del virus y las 130 que se incorporan en septiembre. Según ha dicho, en este primer periodo fue fundamental generar la atención no presencial para evitar que las personas contagiadas acudieran a los centros de salud  y se produjeran aglomeraciones.

Según ha explicado, desde que los centros de salud pudieron acceder a los tests de diagnóstico de coronavirus, comenzaron a descongestionarse los hospitales, un “cambio determinante” ya que actualmente es en la Atención Primaria donde se realiza el mayor número de pruebas y cribados de seroprevalencia.

Dicho esto, ha adelantado que la segunda fase de Atención Primaria, que se iniciará el 11 de septiembre tras informar a las sociedades científicas y médicas, arrancará con el mantenimiento de 744 de los profesionales sanitarios contratados durante el verano una vez que termine el periodo de sustitución.  

Además, se reforzará la atención telefónica. “Somos conscientes de que el número de llamadas entrantes ha sido tan amplio que muchas no pueden ser atendidas”, ha reconocido, por lo que se contratará a 90 personas más que se encargarán de atender las llamadas dirigidas a los centros de salud y consultorios que no reciben respuesta. Es decir, será una suerte de ‘call-center’ donde se derivarán y serán atendidas por personal preparado para un modelo de triaje: se contesta la llamada y se deriva al médico o a las enfermeras en función de la petición y de la urgencia. “El objetivo es que nadie se quede sin respuesta ni cita”.   

“Esto quiere decir que atendemos a más personas y de manera más dirigida”, ha destacado el consejero, insistiendo en que el modelo no presencial también busca prevenir y proteger a los profesionales sanitarios de los centros de salud. “Si hacemos que menos personas se concentren en sitios vulnerables, podemos atender de manera más dirigida y más directa, y los protegemos a todos”. Al hilo de ello, ha destacado que en esta segunda fase se quiere dar una respuesta más adecuada a las carencias de la ciudadanía, que ahora se hace más necesaria necesaria con el inicio del curso escolar y el final de las vacaciones de verano.

Cierta “estabilidad” en los datos

Por otra parte, el consejero de Sanidad se ha referido a los datos de contagios por COVID-19 en Castilla-La Mancha, detallando que se observa en últimas semanas una “cierta estabilidad”, con entre 500 y 600 casos positivos nuevos cada día. Este extremo “hace pensar que las medidas que se van poniendo tienen un efecto, al menos, de controlar el número de casos”. “Esperemos que vayan bajando si cumplimos las medidas”.

La incidencia acumulada mantiene a la región levemente por debajo de la media de las comunidades autónomas con 104 casos por 100.000 habitantes en los últimos 7 días. El número de ingresos diarios también se mantiene estable, con 40 hospitalizaciones, cifra similar a la de altas recibidas, por lo cual “se compensan” los datos. El 8,5% de los hospitalizados son pacientes COVID, lejos de las cifras del pasado mes de abril.

El diagnóstico precoz es para Fernández Sanz uno de los éxitos de las medidas puestas en marcha, toda vez que “cualquier prevención garantiza tener una capacidad asistencial más adecuada”.