“Saludamos con esperanza el nuevo gobierno”, afirmaba Alfonso Gil, responsable de la Federación de Educación de Comisiones Obreras y también coordinador del área pública del sindicato. La organización ve en el acuerdo anunciado por PSOE y Podemos una oportunidad “para recuperar mucho de lo que se ha perdido y construir una región más justa”. En este sentido, y como era de esperar, Comisiones Obreras tiene mucho que exigir al nuevo Ejecutivo regional, en especial en lo referente al empleo público en el que, aseguran, se han perdido muchos derechos. Por esto, señalan que es el momento de construir una Administración con servicios públicos de calidad, a través de empleos y retribuciones acorde al trabajo que desempeñan los profesionales.
Para esto, Comisiones Obreras exige al nuevo Gobierno una negociación inmediata para tratar aquellos asuntos que consideran de máxima prioridad. El sindicato apela al compromiso de negociación que han mostrado tanto el PSOE como Podemos, para que esto se refleje no sólo entre formaciones políticas, sino en el conjunto de la sociedad y, en concreto, con los representantes de los empleados públicos. Para esto, proponen la elaboración de un calendario de aplicación inmediata que se cree antes de la elaboración de los presupuestos de 2016, momento que consideran clave para iniciar “el cambio de la región.
Entre las medidas más importantes, han señalado la necesidad de eliminar las “trabas existentes” en el acceso a los servicios públicos, como el copago sanitario en los colectivos más desfavorecidos, agilizar y reforzar los servicios de dependencia, garantizar la apertura de comedores escolares y un compromiso de ampliación de las ayudas del curso y la gratuidad de los transportes escolar y sanitario. En relación directa con los trabajadores públicos, piden acabar con el “castigo adicional que padecen, a través de la eliminación de la reducción salarial por baja por enfermedad, así como del incremento de la jornada laboral y la reducción del 3% de las retribuciones de este colectivo.
Además, Alfonso Gil se refirió a la gestión privada del Hospital de Toledo, asegurando que esta “debe desaparecer” y “garantizar la gestión pública” de todos los hospitales. En este sentido, el sindicato considera que se deben revisar las medidas de privatización y externalización de los servicios públicos para recuperar la gestión pública “todo lo que sea posible”. La responsable de la Federación de Sanidad, Chelo Cuadras, ha añadido que tanto trabajadores y usuarios han vivido cuatro años con la “espada de Damocles de las privatizaciones” en cuatro hospitales de la región, por lo que exige que la Administración hable claramente en contra de estas medidas de gestión, en especial en el Hospital de Toledo.
Carmen López, de la Federación de Servicios a la Ciudadanía, ha remarcado también la importancia de la recuperación de la negociación colectiva, y ha pedido al Gobierno que aplique las medidas necesarias para intervenir en favor de las Administraciones locales. López ha señalado que la reforma de estas instituciones se está llevando a cabo de manera muy “confusa” y que entiende que las medidas que puede tomar la Junta de Comunidades son limitadas, pero que se debe hacer lo posible por paralizarlas. “Lo importante es el compromiso para revertir la situación”, finiquitó Gil, quien también se hizo eco de las declaraciones de García-Page de la retirada de la ley LOMCE en Castilla-La Mancha, señalando que “hay bastante caos” pero que sí existe un compromiso a nivel nacional de sustituir una ley “partidista” y “rechazada por la comunidad educativa”.