Hace más de un año, Ana Belén Pintado Lucas-Torres, una 'bebé robada' adoptada por un matrimonio de Campo de Criptana (Ciudad Real), consiguió tras meses de investigación, localizar a su madre biológica. Una historia con final feliz que tuvo gran repercusión en los medios por ser una de las pocas personas que ha llegado a conocer a su verdadera madre. “Es una historia única porque de los casos que hay en España, es el primero en el que se han localizado madre e hija y se han podido realizar las pruebas de ADN”, asegura la abogada de Ana Belén.
Desde entonces, su relación con Pilar V.G. una mujer de 69 años, natural de Lanzahita, un pueblo de Ávila, y que actualmente reside en Madrid es muy buena y están recuperando el tiempo perdido: “Tengo una excelente relación tanto con ella como con toda la familia. Mi madre me llama entre tres y cinco veces al día al igual que yo a ella y nos hemos visto varias veces, por ejemplo en los cumpleaños de mis hijos”.
Sin embargo, Ana Belén siempre ha querido que se haga justicia y por eso el pasado mes de enero presentó una querella criminal contra José María Castillo Díaz, el médico que presuntamente está detrás de la adopción de la 'bebé robada'. “Esto no se tiene que quedar aquí, quiero llegar hasta el final y que se haga justicia porque hay muchos casos como el mío. De momento parece que la justicia está haciendo lo que tiene que hacer. Si llegamos hasta el final y el médico tiene que pagar con lo que tenga que pagar, es así”.
El próximo miércoles, 16 de octubre a las 11.30 horas está citado a declarar en los Juzgados de Instrucción de Plaza Castilla de Madrid, por presunta detención ilegal, secuestro y falsedad documental en relación a uno de los muchos casos de bebés robados que presuntamente tuvieron lugar en la Clínica Santa Cristina de Madrid en donde este médico fue director y donde nació Ana Belén Pintado en 1973.
La querella se acompañó de la documentación original con la que contaba Ana Belén Pintado, en concreto una partida de nacimiento original de la querellante, en cuyo margen aparecen datos de adopción con apellidos de adoptantes falsos y la declaración de nacimiento practicada por José María Castillo Díaz en calidad de médico que asistió al alumbramiento. Ambos documentos están firmados por el doctor denunciado, según Ana Belén Pintado.
“Una vez que ellas se encuentran yo les digo que se hagan las pruebas de ADN. En un principio estaban tan seguras que eran madre e hija que no querían hacérsela pero al final accedieron y la prueba dio como resultado, en el 99,99%, que eran madre e hija. Una vez con la prueba, Ana Belén quiso intentar que el caso de este médico se viera en sede judicial, entonces interpusimos una querella criminal contra él”, explica la abogada de Pintado, Aurelia Fuentes.
Considera un éxito que el Juzgado admitiera a trámite la querella ante unos documentos “irrefutables” y las declaraciones de Ana Belén Pintado y su madre. “La juez vio claramente cómo se habían producido los hechos y ha decretado que este señor tenga que ir a declarar en calidad de investigado por los hechos que se le imputan. No sabemos si el señor irá o no o alegará mil cosas como ha sucedido en otros casos, pero en un principio está citado a declarar y estamos muy contentas”, concluye la abogada.