Quintanar del Rey (Cuenca) ha vuelto a concentrarse masivamente esta mañana para solicitar una vez más la paralización de la macrogranja que se está construyendo a 350 metros del pozo de agua de consumo humano que abastece a la población. En esta ocasión la marcha hasta la macrogranja se ha realizado en coche.
El alcalde, Martín Cebrián, ha recordado que este proyecto se encuentra en término municipal de Villanueva de la Jara y es precisamente a su Ayuntamiento al que solicita la paralización cautelar de las obras “hasta que nos den la oportunidad que no nos dieron en su día de poder presentar alegaciones al proyecto”.
El primer edil ha explicado que el Ayuntamiento no fue notificado sobre esta instalación y, además, ha destacado que en el informe de impacto ambiental no viene reflejada la existencia de este pozo de agua. “Por eso enviamos un escrito al Ayuntamiento hace doce días solicitando esta paralización y de momento no hemos tenido contestación”. Cebrián ha señalado que Quintanar del Rey “trabaja sin descanso” por la paralización del proyecto.
Por su parte, el portavoz de la plataforma Stop Macrogranja Quintanar del Rey, Antonio Escribano, ha subrayado los “peligros” de esta instalación para la población por la contaminación de los acuíferos, por la contaminación ambiental -ya que la granja está a 3 kilómetros del casco urbano- y por el peligro que entraña para un pueblo agrícola como Quintanar que se contaminen las tierras y los cultivos.
Preguntado por si le preocupa la situación actual respecto a la COVID-19, el alcalde ha asegurado que los vecinos y vecinas de Quintanar están demostrando un comportamiento ejemplar en todas las actuaciones que se están llevando a cabo para protestar contra la macrogranja. Sin embargo, sí ha apelado a se siga esa responsabilidad porque faltan 15 días para el inicio de la vendimia y “no podemos permitirnos un brote y que nos confinen o que cierren la cooperativa y que la gente no pueda recolectar el trabajo de todo un año”.