El Columpio Asesino: “Hemos querido hacer un disco que transmita la violencia que se ve en las calles”
¿Cuál es la diferencia entre Diamantes y Ballenas Muertas en San Sebastián?DiamantesBallenas Muertas en San Sebastián
La diferencia no es sólo con Diamantes, sino con todos los demás trabajos. Creemos que cerramos una etapa, en la que conseguimos llevar al extremo la esencia de los elementos y conceptos planteados en los anteriores discos. Lo que más se diferencia es que es un disco que se acerca a la idea de lo conceptual. Antes hacíamos las canciones no pensando en el álbum, y aquí sí lo hemos hecho. Todas las canciones han ido en este rumbo, en el fin de una etapa y una crisis. Hemos creado este disco bajo la sensación de fin de etapa y crisis que vivimos.
¿Cuáles son estas ballenas muertas?
Ballenas Muertas en San Sebastián es la metáfora del hundimiento que vemos todos los días en España, como desaparece el Estado de Bienestar, como desaparece la clase media. Viene un poco de la ballena enorme que apareció en la playa de la Concha, imagen que nos recordó mucho la del Costa Concordia encallado. Ambas imágenes nos parecieron un buen símbolo con mucha fuerza del encallamiento que vivimos, de ahí viene este título. La Ballena puede ser desde la clase media, hasta nosotros mismos, incluso, como grupo.
¿Cuál es la crisis de la que hablas en el grupo?
Esta crisis tiene dos vertientes: por un lado, como individuos, la falta de valores y valoración, parecemos todos perdidos, y vemos que lo colectivo se ha perdido, en la búsqueda de lo individual. Desde el grupo, siempre para nosotros es una odisea hacer un disco, siempre nos hemos planteado si será el último disco, y así ha sido con todos, y mira llevamos cinco, pero siempre estamos así.
Todo contribuye: desde la atmósfera personal, desde el individuo como ciudadanos, como grupo, y como sistema. Es un sentimiento que incluso roza lo pesimista, que ha llegado también al sonido y a la producción. Hemos querido hacer un disco que transmita la violencia que se ve en las calles, girando en torno a la tensión y el malestar. Por eso tiene momentos violentos, el disco hemos tenido una producción muy industrial por decirlo así, que representa la decadencia de las grandes ciudades, en teoría.
El disco lo produjisteis vosotros mismos. ¿Cómo fue la experiencia?
Estábamos un poco encallados con nuestra antigua productora. Así que alquilamos en Navarra una casa donde poder encerrarnos y trabajar en el disco. Nos topamos con una casita en los Pirineos que se estaba cayendo a trozos, algo que nos influenció también. Estuvimos tres o cuatro meses conviviendo todo el verano y lo produjimos nosotros. El experimento que era muy arriesgado, el estar viviendo todos en la misma casa podía ser muy intenso, pero pasamos un verano de puta madre, sin internet, sin nada y trabajando a gusto.
¿Repetiríais?
Desde luego, fue un gran verano, el pueblo era precioso, y muy bien, nos vino bien el apartarnos también de Pamplona y estar sin internet y sin tele.
¿Crees que la música debería funcionar como una denuncia social?
No sé, yo no voy a decir a nadie lo que tiene que hacer con su grupo o ser tan rotundo al afirmar que debe o no debe ser la música. Lo que sí entiendo es que nosotros tenemos el deber moral de no dar la espalda a lo que está pasando, se me hace extraño que la gente saque discos como si nada estuviese pasando. Esto no significa que la música debe ser así, vamos que cada uno haga lo que le dé la puta gana. Nosotros sí tenemos este compromiso. Y así lo hemos querido reflejar en el disco.
¿Qué destacáis de la gira?
La verdad es que estamos más que contentos, porque es un disco muy arriesgado, después de Diamantes la gente se esperaba otro disco, porque lo que hemos hecho no es comercial. Entendemos que no es para todos los públicos, pero ha sido muy premiado en Latinoamérica y España, hemos ido dos veces a México y ahora vamos a Los Ángeles. Hemos dado otro gran paso en cuanto a asistencia de público, estamos muy contentos porque la gente ha entendido el riesgo y lo ha agradecido, y claro, está bien que salgamos de nuestra zona de confort. A nuestro público le gustan los bandazos que damos, y estamos muy contentos con eso.
¿Y qué vais a ofrecer en Toledo?
Creo que es la segunda vez que vamos a tocar, y qué te voy a decir, que animaría a la gente que vaya porque llevamos ya un año de gira, tenemos un concierto muy trabajado y estamos en plena forma, después de presentar las canciones. Estamos en un buen momento, es emocionante por lo menos.
¿Cómo está el rock en España? ¿Ha muerto?
No creo, ha evolucionado. Pero una idea del rock igual sí que ha muerto, está en otra. En este país se arriesga poco. Pero no me siento con mucha autoridad para decir gran cosa sobre la música rock
¿Creéis que Toro se ha comido el resto de vuestras canciones?Toro
Gracias a Toro nos ha conocido muchísima gente y le debemos mucho, ya podíamos hacer canciones así en todos los discos. Nunca sabes dónde está la fórmula para conectar tanto como con esa canción. A veces se te hace aburrido, pero como todo. Le debemos mucho a la canción, pero no creo que se haya zampado el resto del repertorio. Está claro que cuando la tocas, la gente se entusiasma más, y ojalá hubiésemos hecho diez canciones como Toro.