El acuerdo entre PSOE y Podemos para el cambio de signo político en el Gobierno de Castilla-La Mancha ha provocado que muchos altos cargos del Ejecutivo regional sigan presentando su dimisión al frente de sus departamentos, ante la certeza de que no continuarán en estos puestos. El Diario Oficial de Castilla-La Mancha ha publicado el cese de los directores generales de Política Financiera y Tesorería, Manuel Aguilar; de la de Organización, Calidad Educativa y Formación Profesional, Isabel Couso, y del de Telecomunicaciones y Nuevas Tecnologías, Daniel Martínez. En los tres casos, el Gobierno regional les agradece los servicios prestados.
Estas dimisiones se suman a las ya registradas la semana pasada cuando cesaron en sus cargos la directora general de Gestión e Infraestructuras del SESCAM, Amparo Carrión; la de Carreteras de la Consejería de Fomento, Margarita Torres, y el Director-Gerente de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Juan Ángel Sánchez-Mayoral. También en estos tres casos se alegó que su marcha se producía a petición propia.
Todos estos ceses se han producido tras conocerse que otro director general, el de Comunicación, ha sido sancionado por malas prácticas durante la campaña electoral, y en un mes en el que aún no se conoce con certeza si la todavía presidenta en funciones, María Dolores de Cospedal se quedará en Castilla-La Mancha en las labores de oposición de las Cortes o si dejará el cargo. Tampoco se sabe si conservará su cargo de secretaria general del Partido Popular. Mariano Rajoy tiene previsto anunciar cambios en el Gobierno en el partido el jueves 18 de junio.
Otra de las dimisiones conocidas en los últimos días dentro del PP fue la de la electa diputada regional Carmen Riolobos, que decidió renunciar al escaño que había obtenido en estas elecciones por Toledo para continuar como senadora nacional (ambos cargos son incompatibles, por lo que debía elegir).