Castilla-La Mancha seguirá cerrada en Semana Santa conforme al acuerdo con Sanidad pero restringirá a cuatro los comensales en interior de locales

El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha, reunido con carácter extraordinario, ha aprobado las medidas que la región adoptará de cara a la Semana Santa. Así, desde el 26 de marzo al 9 de abril, esta comunidad autónoma asumirá el acuerdo conseguido ayer en el Consejo Interterritorial de Salud de cerrar perimetralmente todas las comunidadaes autónomas, y que solo contó con el rechazo de la Comunidad de Madrid. De esta forma, Castilla-La Mancha se mantendrá confinada al menos hasta esa fecha, momento en el que habrá una nueva reunión para decidir nuevas medidas. Las restricciones para el Puente de San José, que también se abordaron con el Ministerio, no afectan en principio a Castilla-La Mancha, puesto que no es festivo en la región. Esta noche, a las 00.00 horas se aprobará además un nuevo decreto por el que se armoniza la situación en todos los pueblos de la región: aquellos que mantenían restricciones especiales pasarán al nivel 2 como el resto de la comunidad autónoma.

El único cambio que la Junta realizará sobre la propuesta de Sanidad es el número de personas que pueden estar en grupo en el interior de bares y restaurantes, que será de cuatro en Semana Santa. Se mantendrá el máximo de seis en los exteriores, exceptuando convivientes que sean de mayor número, y se recomienda que las reuniones en domicilios sean solo de convivientes.

Asimismo, Castilla-La Mancha establecerá el toque de queda a las 23.00 horas en el periodo mencionado, que actualmente está fijado a las 00.00 horas. Como novedad, los locales de hostelería no tendrán que cerrar una hora antes como hasta ahora, sino que podrán también mantenerse abiertos hasta las 23.00 horas. En el caso de los clientes que permanezcan en esos locales, deberán calcular el tiempo de regreso a casa para cumplir con el toque de queda. Es decir, no pueden permanecer en bares y restaurantes hasta esa hora.

El anuncio lo ha realizado el presidente regional, Emiliano García-Page, en un receso de la reunión. Tras celebrar el consenso alcanzado entre las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad de cara a la Semana Santa en medio del “vendaval político” por la situación en Murcia y en la Comunidad de Madrid, ha dicho que ese acuerdo “fortalece la idea de combatir el virus todas a una y de la misma manera la recta final de la pandemia hasta que universalicemos la vacunación”.

En este sentido, ha dejado claro que el decreto del Ministerio es de obligado cumplimiento para todas autonomías, pero que son “condiciones mínimas” a las que cada región puede añadir “otras de mayor calado”. No será el Caso de Castilla-La Mancha, que lo único que va a cambiar respecto a ese documento estatal es que entre el 26 de marzo y el 9 de abril el número de comensales en un establecimiento (actualmente fijado en un máximo de seis personas), se rebajará a cuatro, al margen de los que sean convivientes.

Restricción de movilidad, armonización de medidas y código QR

El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha detallado posteriormente estas medidas, defendiendo la restricción de la movilidad como la forma de frenar la expansión de la COVID-19. En cuanto al toque de queda, ha explicado que la decisión de ponerlo a las 23.00 horas también para la hostelería se ha adoptado conforme a la opinión de los técnicos. Del mismo modo, ha insistido en la recomendación de que, dentro de los domicilios, no haya encuentros más alla de los convivientes.

Sobre las novedades que se publican a las 00.00 horas de esta noche para su inmediata entrada en vigor, en primer lugar se aprueba que todos los municipios que mantenían mayores restricciones pasen al nivel 2 de alerta como el resto de la región y por un periodo de diez días. En segundo lugar, también se publica esta noche la renovación de la APP 'Ocio Responsable' que incluye el código QR de rastreo para la hostelería, aunque, como adelantó García-Page, será con carácter voluntario 'sine die'. “Estamos trabajando con el Gobierno central en el estudio de una aplicación a nivel nacional para todos los locales y además seguimos buscando la máxima seguridad en nuestra aplicación”, ha esgrimido el consejero como motivos para no hacer obligatoria esta herramienta, tal y como estaba previsto en un principio.

Sobre las declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, defendiendo que los madrileños puedan viajar a sus segundas residencias, ha dejado claro que “no es algo en lo que se que pueda estar o no de acuerdo con ella”. “Es algo que estableció el Consejo Interterritorial y como consejero, como médico, sé que es la movilidad lo que genera mayor contagio y es lo que hemos decidido atajar. Es lo que entedemos que se debe hacer, es una cuestión de mensaje único para luchar contra el único enemigo, que es el virus”. De hecho, ha dejado claro que si hay turistas de otros países que llegan a Madrid, “es para hacer turismo en Madrid, no pueden salir de la autonomía para hacer turismo”.

Fernández Sanz ha resaltado que los datos siguen siendo “buenos” en toda la región aunque con una ralentización de los contagios “más lenta” y no tan aguda como hace tres semanas. Actualmente, la incidencia acumulada de coronavirus en Castilla-La Mancha es de 76 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, y de 30 por cada 100.000 habitantes a siete días. Ha añadido que la previsión es que las siguientes semanas sean “estables” y por debajo de la media estatal en cuanto a las cifras. Finalmente, también ha recaldado la “tranquilidad” en cuanto a la capacidad asistencial: actualmente apenas son 165 las camas convencionales con pacientes COVID y 66 las de UCI.