Vuelve a insistir el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en la inoculación de la tercera dosis de la vacuna contra la COVID-19 a las personas residentes en centros de mayores. En esta ocasión se ha mostrado convencido de que esta posibilidad “se tendrá que abrir paso” y es “inevitable” a medio plazo debido a la incidencia de la pandemia en las residencias desde el primer momento y a que el virus afecta en mucha mayor medida a estas personas.
“Han sido los colectivos más afectados y en las residencias no hay burbuja familiar, hay un entrar y salir diferente. No digo que se haga con todos los mayores del país, sino en las residencias, donde en Castilla-La Mancha la media de edad es de 87 años y donde la tercera dosis es últil porque son muy muy muy vulnerables. Un 5% de COVID les hace mucho más daño”, ha argumentado al respecto.
Dicho esto, García-Page ha puesto como ejemplo el hecho de que hoy haya comenzado en la comunidad autónoma la inyección de la tercera dosis a personas inmunodeprimidas por diferentes motivos, según lo aprobado por el Ministerio de Sanidad. Considera que los residentes en centros de mayores son también vulnerables y deben igualmente recibir esa tercera inyección de la vacuna.