El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha adjudicado este mes la contratación de una asesoría externa para evaluar la idoneidad del emplazamiento del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos radiactivos de alta actividad proyectado en Villar de Cañas (Cuenca). La empresa adjudicataria es la filial española de la multinacional de la ingeniería United Research Services (URS) y realizará esta labor durante un año por un total de 211.750 euros.
El objeto del contrato es la “evaluación e inspección de los estudios de emplazamiento de la Solicitud de Autorización Previa y de Construcción del ATC”. El CSN justifica la necesidad de esta contratación en que “se necesita el asesoramiento técnico de una empresa de ingeniería que cuente con un equipo de especialistas altamente cualificados en diversas disciplinas (Geología, Sismología, Geotecnia o Ingeniería del terreno, Meteorología, Hidrología superficial, Hidrogeología e Hidrogeoquímica, análisis de riesgos externos naturales e inducidos)”.
El CSN recibió el pasado mes de enero la petición del informe preceptivo, por parte del Ministerio de Industria, en relación con las solicitudes presentadas por Empresa Nacional de Residuos (ENRESA) de autorización conjunta, es decir autorización previa y autorización de construcción del ATC.
Ante la escasez de personal del CSN, que denunció su Presidente en el Congreso de los Diputados el pasado mes de marzo, se ha optado por contratar una asistencia técnica a la que se encomienda, tal como consta en el Pliego que sirvió de base para la contratación, “el análisis y evaluación de los estudios de caracterización hasta definir las bases de diseño del emplazamiento del ATC, así como los potenciales riesgos externos asociados a industrias próximas a la instalación, vías de transporte y accesos”, y el “apoyo en las inspecciones que se realicen al emplazamiento del ATC”. Su labor finalizará “elaborando un dictamen técnico final sobre la idoneidad del emplazamiento y parámetros de diseño derivados”.
Escasez de personal técnico en el CSN
El pasado mes de marzo el Presidente del CSN, Fernando Martí, compareció ante la Comisión de Industria, Energía y Turismo del Congreso de los Diputados y, entre otros aspectos, se refirió a los “nuevos retos” que suponen para este órgano supervisor tanto el proceso de envejecimiento de las centrales nucleares como la autorización del ATC.
El presidente del Consejo hizo referencia, tal como consta en el texto íntegro de su intervención ante la Comisión de Industria, a la “escasez de personal técnico” para “afrontar las funciones de este gran reto que será el ATC”. La nula reposición de técnicos desde 2010 y el progresivo envejecimiento de la plantilla eran sus principales motivos de preocupación.
El CSN fue excluido de la “tasa de reposición cero” en los Presupuestos Generales del estado para 2014 y por ello en la Oferta de Empleo Público que se ha aprobado (BOE 10 de abril de 2014) se ha incluido la dotación de 8 nuevos técnicos de seguridad nuclear y protección radiológica para el CSN, 6 de nuevo ingreso y 2 por promoción interna. Ahora bien tal como indicó el Presidente de este organismo en sede parlamentaria estos técnicos precisan “tener un periodo de formación mínimo y un adecuado solape con las generaciones de técnicos salientes. Un periodo formativo que se estima no inferior a 5 años”.