La Real Fundación de Toledo se suma a la Capitalidad Gastronómica de Toledo con una serie de conferencias en su sede de Roca Tarpeya que se prolongarán hasta el 19 de mayo. Alimentos, paisajes y gastronomía constituyen el eje central de estas jornadas diseñadas por María Pía Timón, coordinadora del Plan Nacional para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial en el Instituto del Patrimonio Cultural de España.
Ella fue la encargada de inaugurar ayer estas jornadas para defender que la gastronomía tiene “mucho que ver” con patrimonio inmaterial como expresión cultural “muy directa” aunque esa idea no haya cuajado hasta hace relativamente poco tiempo, explica.
“Patrimonio significa herencia y si hay algo que hemos heredado es la forma de cocinar en las casas. Los aromas, los colores… Eso que a veces nos transporta a un ambiente determinado”. Cree que Castilla-La Mancha ha sido una de las Comunidades Autónomas donde más se ha trabajado por difundir la cultura gastronómica. Y el año de la Capitalidad Gastronómica de Toledo puede servir, en su opinión, para “revalorizar” manifestaciones culturales “de una riqueza increíble” y, sobre todo, para “sensibilizar a la población de la importancia de la gastronomía y los riesgos de que determinadas personas se arroguen la creación de una determinada receta. Hay muchos elementos que hay que respetar”.
La cocina también se globaliza
La cocina también se globalizaPero además, María Pía Timón pone el acento en los “riesgos de la globalización”. Se refiere en particular a la importación de productos, “de otros lugares más baratos” que puedan terminar sustituyendo a los originales.
Cree que la globalización puede desvirtuar los aspectos más tradiciones de la cocina. “Hay normas globalizadoras que provocan que la cocina pierda sus raíces” e incide en la necesidad de “respetar las manifestaciones asociadas a rituales, en fiestas, comidas comunales o productos determinados que generan identidad festiva, como el azafrán en Consuegra”.
En Toledo, “crisol de culturas”, dice, “han quedado los aliños y las especias”. Un reflejo de la propia mezcla cultural de siglos y, de hecho las jornadas harán un recorrido por la alimentación en el mundo antiguo, en las épocas del Greco y de Cervantes. ¿Qué comían y por qué? “Ahí está el sustrato cultural de la cocina toledana”, dice esta experta.
Los términos gastronomía, alimentación o dieta se han ido progresivamente incorporando a documentos de organismos internacionales como la UNESCO y también a la legislación española. Hoy aparecen como muy destacados en la Ley 10/2015, de 26 de mayo, para la salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial.
Por delante, para los amantes de la historia y la gastronomía, seis conferencias en Toledo que incluyen el paisaje de viñedo en Castilla-La Mancha, las formas de vida y prácticas sociales en Toledo y provincia, las fiestas vinculadas a la gastronomía y cómo han llegado hasta nuestros días porque…no solo de monumentos vive la ciudad.
La Real Fundación de Toledo se suma a la Capitalidad Gastronómica de Toledo con una serie de conferencias en su sede de Roca Tarpeya que se prolongarán hasta el 19 de mayo. Alimentos, paisajes y gastronomía constituyen el eje central de estas jornadas diseñadas por María Pía Timón, coordinadora del Plan Nacional para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial en el Instituto del Patrimonio Cultural de España.
Ella fue la encargada de inaugurar ayer estas jornadas para defender que la gastronomía tiene “mucho que ver” con patrimonio inmaterial como expresión cultural “muy directa” aunque esa idea no haya cuajado hasta hace relativamente poco tiempo, explica.